El delegado en Miguel Hidalgo, Víctor Hugo Romo, anunció que la emisión de permisos para la operación de establecimientos mercantiles en la zona de Polanco se encuentra suspendida, hasta concluir con una profunda auditoría que la administración está realizando respecto del cumplimiento de los requisitos de estacionamiento a que la Ley obliga.
Lo anterior, señaló, como consecuencia de la saturación de establecimientos, particularmente del giro restaurantero que ha aquejado a la zona en los últimos años. El problema, explicó Romo, es que en administraciones anteriores no se hizo un cruce apropiado entre los estacionamientos y los restaurantes, entonces no hay certeza de que verdaderamente estén cumpliendo. “Hay casos, abundó Romo, nos estamos encontrando con que un estacionamiento con 50 espacios, ha expedido cartas de exclusividad por 200 o 300, lo cual pervierte la Ley y provoca la saturación y los problemas de movilidad que estamos viendo”.
Derivado de esto, la delegación determinó suspender toda emisión de permisos para restaurantes hasta concluir con la auditoría. “Hoy por hoy, dijo Romo, no sabemos si realmente están cumpliendo con los requisitos porque si bien en lo individual un restaurante puede traer su contrato de estacionamiento, puede ser que ese contrato no sea viable porque ese mismo estacionamiento esté ya sobrevendido. Entonces no podemos analizarlo individualmente sino que tenemos que hacerlo en el agregado”.
Romo detalló asimismo, que la auditoría, consistente en tres etapas distintas, va ya muy avanzada. En la primera etapa, ya concluida, se emitió un requerimiento a los 93 estacionamientos de la zona para que señalaran con cuantos cajones de estacionamiento cuentan así como el número de contratos celebrados con establecimientos mercantiles; en la segunda etapa, actualmente en curso, se están cotejando las respuestas obtenidas con los expedientes de los establecimientos en poder de la administración y, finalmente, en la tercera, se realizarán las verificaciones administrativas correspondientes a los establecimientos en que pudieran encontrarse irregularidades.
“Con esto, concluyó Romo, podremos garantizar, tanto a vecinos como a propietarios de establecimientos, que la Ley se cumple a cabalidad. Como autoridad no podemos cerrar los ojos a un desorden que se ha generado por omisiones históricas como ésta”.