De nueva cuenta, SixFlags utiliza disposiciones discriminatorias; ahora el problema radica en la venta del boleto llamado Flash Pass, el cual evita hacer fila en los juegos mecánicos de mayor demanda, en detrimento de quienes pagaron por el servicio, vía la entrada general.
El diputado local del PRD, Alejandro Robles Gómez, recordó que SixFlags México cuenta con antecedentes por violentar derechos humanos, como fue el caso del joven Carlos Omar Uribe Guzmán, a quien en abril del año pasado se le negó el acceso a diversos juegos debido a que padece Síndrome de Down.
Además, en enero de 2013 la empresa ya había sido prevenida por la Copred, debido a sus disposiciones discriminatorias, pues a través de un código establecía que “no se permite el ingreso al parque con ropa o tatuajes visibles que contengan mensajes rudos o vulgares y con lenguaje ofensivo o gráfico. (No se permite como solución voltear la ropa)”, se leía.
En el primer caso, indicó Robles Gómez, el parque de diversiones pidió una disculpa pública en su cuenta de Facebook, ante la inconformidad de la sociedad y diversas demandas interpuestas ante el Conapred; mientras que en el segundo caso, la empresa lo resolvió modificando su política, por lo cual la Copred otorgo un reconocimiento de establecimiento libre de discriminación.
Sin embargo, cae nuevamente en discriminación, ante la presunción de que en el parque de diversiones se cometen actos de discriminación en contra de un numeroso grupo de visitantes con boleto más caro y “exclusivo” para tener acceso inmediato y sin hacer fila a los juegos mecánicos de mayor demanda.
El diputado perredista, adelantó que presentará esta semana un punto de acuerdo ante la Comisión Permanente de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), para exhortar a la Comisión de Derechos Humanos del DF, al Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred) y al Mecanismo de Seguimiento y Evaluación del Programa de Derechos Humanos del DF, a fin de que asuman una postura al respecto.
El legislador precisó que con el boleto Flash Pass, hay un trato diferenciado por la prestación del mismo servicio, además de que deja en estado de indefensión a las personas que pagan su acceso general y se encuentran formadas para subir al juego, haciendo de lado el principio general de derecho que indica que “primero en tiempo, primero en derecho”.
Robles Gómez agregó que se trata de una conducta que con o sin intención vulnera a la persona por una cuestión económica por la prestación de un mismo servicio, creando con ello desigualdad.
Agregó que también la empresa deja al descubierto la venta doble por un mismo servicio, ya que el objeto de pagar el acceso al parque de diversiones implica el acceso a la mayor parte de los juegos, en algunos de los cuales, por ser de mayor atractivo, no se cumple con el principio de equidad, pues dentro del parque la empresa pone a la venta un nuevo pase para que los visitantes eviten hacer largas filas, evidenciando con ello vicios ocultos, como es el trato diferenciado por la prestación de un mismo servicio.
“Si bien esta práctica genera probables ganancias para la empresa, actúa dolosamente en perjuicio de sus clientes, afectando su derecho a la no discriminación, por razones económicas y recibiendo un engaño en la venta del servicio”, argumentó el legislador perredista.
Por lo anteriormente expuesto, Alejandro Robles manifestó que es importante que las instancias citadas en el exhorto estudien el caso para que, en caso que se acredite una violación al derecho a la no discriminación, se hagan las gestiones pertinentes para ser suprimido y se exhorte a la empresa a actuar respetando a la persona humana.