En el marco del Día Mundial de la lucha contra el VIH-SIDA, el Gobierno capitalino, a través del Instituto de las Mujeres del Distrito Federal, refrenda su compromiso para que esta pandemia no siga la tendencia de feminización que actualmente muestra a través de la promoción y defensa de los derechos humanos de las mujeres que lo portan, así como la implementación de acciones para prevenir su propagación.
La noche de ayer 30 de noviembre, cientos de monumentos en todo el mundo se iluminaron de color rojo para llamar la atención sobre esta lucha. En la Ciudad de México los monumentos y edificios emblemáticos como el de la Revolución, la Diana Cazadora o los edificios del Zócalo también se adhirieron a esta iniciativa.
En la columna de la Independencia de la Ciudad de México, la titular del InmujeresDF, Martha Lucía Mícher Camarena, señaló que en los últimos años, la epidemia del VIH-SIDA se ha venido incrementando de forma acelerada entre las mujeres, sobre todo entre las adolescentes, las migrantes y las trabajadoras del hogar.
“Una de la conclusiones de la XVII Conferencia Internacional de SIDA celebrada en Viena, es que la constante desigualdad en el ámbito de los derechos económicos, sociales y culturales contribuye a perpetuar la subordinación de las mujeres, colocándolas en una situación de violencia y otras formas de abuso, factores que aumentan su vulnerabilidad ante el VIH”, explicó.
En este sentido, recordó que desde el Instituto que encabeza, se integró el “Modelo de Atención y Prevención del VIH para las Mujeres en la Ciudad de México”, que tiene como objetivo enfrentar la feminización del VIH no sólo desde el ámbito de la salud, sino que, desde la perspectiva de género, incorpora otros derechos humanos fundamentales, como vivienda, empleo, educación y servicios jurídicos a este sector. Todo ello para posibilitar una vida digna para las mujeres que viven con VIH y sus familias
En nuestro país, una de cada cuatro personas que vive con VIH es mujer y el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), es la séptima causa de muerte entre las mujeres de 25 a 34 años de edad por lo que, dijo Mícher Camarena, es indispensable incorporar la perspectiva de género a las políticas públicas en materia de prevención y atención al VIH SIDA.
Por ello, el Gobierno del Distrito Federal, a través del InmujeresDF, catorce dependencias y cuatro organizaciones de la sociedad civil, integró el mencionado modelo para dar atención a las mujeres que en muchos casos, son abandonadas por sus familiares o parejas y despedidas de sus empleos por ser portadoras del virus, e incluso se les niega o condiciona los servicios médicos.
“Es claro que existen diversos factores que incrementan la feminización del VIH relacionados con la vulnerabilidad biológica, social, cultural, epidemiológica y de género, las cuales colocan a las mujeres en una situación de riesgo. En el caso de las mujeres con VIH, ellas suelen ser blanco de discriminación y estigma, una situación que se agrava por su condición de mujer, pobre, joven o indígena”, apuntó.