“En la tienda me cobran diez pesos por comprar cuatro plumas, ¿cuánto pagaré si compro tres? De acuerdo con PISA (Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes, por sus siglas en inglés), el 70% de los estudiantes de 15 años no es capaz de resolver problemas de ese tipo”, comentó José Antonio de la Peña, director del Centro de Investigación en Matemáticas, quien calificó como “grave” la incompetencia de los jóvenes para calcular una regla de tres simple.
Para el especialista, el bajo nivel de aciertos que obtienen diferentes grupos de edades cuando se les aplican pruebas similares muestra una pobre cultura científica del mexicano promedio. “Esta falta de cultura científica es una de las múltiples manifestaciones del grave problema de preparación y de rendimiento escolar entre los jóvenes mexicanos”, aseguró De la Peña durante su participación en la mesa Hacia dónde va la enseñanza de las matemáticas.
El evento se realizó el pasado jueves 25 de abril en el Colegio Nacional y fue organizado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, la Academia Mexicana de Ciencias y el Consejo Consultivo de Ciencias.
Participaron además los investigadores Carlos Bosch, del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM); Samuel Gitler, de El Colegio Nacional y Rodolfo Tuirán Gutiérrez, subsecretario de Educación Media Superior, quienes dieron un panorama sobre la problemática actual y propusieron medidas que deriven en un mejor desempeño en matemáticas de los alumnos de educación básica y media superior.
Es común que se responsabilice a alguien del bajo desempeño escolar, comentó De la Peña, “¿Pero hasta dónde es culpa del maestro y hasta donde llega el problema al sistema educativo? Sin duda, hay que atender asuntos de formación y de capacidades de los maestros, pero también poner atención a la sobrecarga de contenidos curriculares que privilegian el manejo superficial de información y no desarrollan habilidades complejas”.
Al respecto, Bosch apuntó que la preparación académica de la mayoría de los maestros que imparten dicha materia es “inadecuada” para las necesidades actuales. Esto se debe, en parte, a los planes de estudio con los cuales se formaron; por ejemplo, el de la Benemérita Escuela Nacional para Maestros, las matemáticas se imparten por muy pocos semestres.
“Afortunadamente las cosas están cambiando”, afirmó. Tal es el caso de las Escuelas Normales para maestros de primaria, en donde los planes de estudio ya incluyen cuatro semestres de matemáticas que contemplan aspectos de enseñanza y aprendizaje de aritmética, álgebra, geometría y procesamiento de la información estadística.
No obstante, advirtió que la implementación de los nuevos programas en las normales aún tardará en mostrar resultados, pues los maestros actuales se formaron con los antiguos planes de estudio. “Si bien nos va y si trabajamos intensamente, habrá un pequeño cambio en las evaluaciones internacionales dentro de diez años”.
En ese sentido, De la Peña comentó que estamos ante un problema de educación estructural y antiguo en la sociedad mexicana, por lo que ningún programa que se ejecute este año mejorará los resultados para el año próximo.
En el evento también se abordaron los programas que existen en distintas partes del país para fomentar y mejorar el desempeño en matemáticas tanto de maestros como de alumnos. Muchos han sido exitosos hasta ahora, pero aún son insuficientes para incluir a los más de 1 millón 200 mil maestros de educación básica y media que hay en el país, coincidieron los especialistas.
De esta manera, una de las medidas más subrayadas por los participantes fue identificar, replicar y dar continuidad a las buenas prácticas docentes, aumentar el número de programas que profundicen sobre la manera en cómo enseñar matemáticas y revisar permanentemente las políticas educativas relacionadas con esta disciplina, coincidieron los especialistas.
Bosch añadió que es pertinente desarrollar información y hacer investigación para “realmente” evaluar el desempeño de los maestros, así como definir conjuntos de estándares mínimos en cada región del país para maestros y alumnos de matemáticas de primaria y secundaria.
Respecto a las aún polémicas pruebas ENLACE (Evaluación Nacional del Logro Académico en Centros Escolares) que realiza la SEP periódicamente desde hace unos años para evaluar el desempeño de los maestros, Rodolfo Tuirán enfatizó su valor diagnóstico.
“Estas pruebas son instrumentos muy valiosos que permiten identificar fortalezas y deficiencias y, a partir de estos elementos, buscar las formas para mejorar cada situación, siempre desde una perspectiva no solo educativa pero también reconociendo la multicausalidad de los fenómenos”, afirmó.
La importancia de tomar cartas en el asunto es clara: “La alfabetización matemática es tan indispensable que constituye una condición fundamental para ejercer la ciudadanía de manera activa, crítica y responsable”, sostuvo Tuirán.