40 años, Arte y Ambiente es la exposición que celebra el cuadragésimo aniversario del Festival Internacional Cervantino (FIC), uno de los encuentros culturales más importantes en México y el mundo. Al mismo tiempo, recuerda la primera gran conferencia de la ONU sobre aspectos ambientales -la Cumbre de la Tierra de Estocolmo, Suecia- que estableció la necesidad de cambiar nuestra relación con el entorno para frenar su deterioro y sentó las bases de la actual política internacional en esta materia.
La muestra se ubica en la Casa de Cultura del Municipio de Guanajuato y es un esfuerzo conjunto entre el PUMA (Programa Universitario de Medio Ambiente), la Coordinación de la Investigación Científica y el museo Universum, ambos de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Está dirigida principalmente a niños, pero también pueden visitarla adolescentes y adultos. “La idea de la exposición es que los visitantes sean básicamente locales y que a partir de ésta reflexionen sobre el impacto ambiental de sus estilos de vida y cómo con pequeños cambios colectivos sostenidos podemos realmente hacer la diferencia en los temas ambientales”, dijo Dalia Ayala, responsable de Educación Ambiental del PUMA.
El recorrido puede hacerse de manera independiente, aunque la intención es que sea interactiva; para ello, equipos multimedia y personal especializado en educación ambiental, guían a los asistentes a lo largo de los distintos módulos.
Primero se les invita a hacer conciencia sobre cómo contribuye nuestra vida cotidiana a la contaminación ambiental. Mediante un equipo multimedia, el visitante calcula su huella ecológica, o la superficie del planeta que ocupa cada año siguiendo su actual estilo de vida. Si el resultado arroja la superficie de más de un planeta, “significa que algunos de nosotros consumimos los recursos naturales de alguien más, sea de otra región del planeta en este tiempo, o de alguien más en el futuro; es decir, estamos hipotecando los recursos del planeta”, dijo Ayala.
También se les muestra una propuesta de separación de residuos, útil para una casa pequeña y acorde con la diversidad de categorías en cada localidad. Otra sección retrata en un cómic la historia de las políticas ambientales a nivel mundial desde 1972, cuando se celebró la Cumbre de Estocolmo. La última sección está enfocada a fomentar la participación de las personas, “resaltamos que es necesario tener políticas globales pero también hacernos responsables de lo que a cada quien le toca”, dijo Ayala.
La respuesta del público ha sido muy positiva pues en promedio se atiende diariamente entre 70 y 100 niños de las escuelas locales. Además, “ha sido interesante notar que las personas tienen mucha información y están ávidas de participar; por eso nuestra intención ha sido apoyar a todo mundo para que reafirme lo que sabe o genere nuevos conocimientos”, agregó Dalia Ayala.
Al término del recorrido se ofrecen talleres gratuitos que buscan reforzar los mensajes de la exposición, tienen una duración aproximada de 60 minutos y abordan los siguientes temas: Ciclos de Vida (cómo se producen los objetos que utilizamos y adónde se dirigen cuando los desechamos), Consumo responsable (cuál es el impacto de nuestro consumo y cómo reducirlo), Valores y percepciones ambientales (cómo interactuamos con la naturaleza a partir de los valores que cada cultura le otorga a la naturaleza).
“La última semana ofreceremos un quinto taller sobre cosecha de agua de lluvia para fomentar estilos de vida más armoniosos con el ambiente, dada la disminución de disponibilidad del recurso en el país”, comentó la organizadora. Los asistentes podrán elaborar un pequeño colector que podrán instalar en sus hogares.
Aclaró que no se pretende dejar a las personas con un aire de desesperanza o que no se puede hacer nada, sino decir: “Ya viste esto, ya reflexionaste, ahora te invitamos a que tomes acciones concretas”.
40 años, Arte y Ambiente estará abierta al público hasta el 21 de octubre, de lunes a sábado de 09:00 a 19:00 hrs. Dado que la exposición se planeó para ser itinerante, tras su regreso a la ciudad de México, existe la posibilidad de hacer un calendario con museos y casas de cultura de los municipios que la soliciten.