México es el segundo centro genético de hongos más importante del mundo, lo que le brinda oportunidades en un sector comercial internacional valuado en billones de dólares anuales, indicó en la UNAM, Jesús Pérez Moreno, investigador del Colegio de Postgraduados, campus Montecillo.
Al abordar el impacto que tienen los hongos en la cultura, economía y sociedad en el planeta, señaló que en el caso de México y Guatemala, esto es resultado de un patrón de subsistencia y apreciación ancestral, con usos que incluyen no sólo su valor como alimento sino también su importancia medicinal, lúdica e incluso artesanal.
En el caso de Japón, algunos hongos como el matsutake, además de alimento, es un símbolo de la llegada del otoño y se relaciona con la amistad, dijo Pérez Moreno.
En el Jardín Botánico de la UNAM, refirió que las características de la mayoría de estos hongos no permiten su cultivo, aunque se ha demostrado que son un factor de conservación forestal, al tiempo que traen beneficios socioeconómicos para la población rural. Un ejemplo, es la producción de trufas en España, “que mantuvo en pie los bosques españoles” y que produce piezas de valor económico elevado.
México podría seguir el ejemplo de países como China para aprovechar mejor sus recursos fúngicos y agregar valor a sus hongos con estrategias de conservación (con deshidratados y conservas), empacado y establecimiento de rutas comerciales, sostuvo el investigador. En 2008, la región china de Yunnan, por ejemplo, exportó 10 mil 500 toneladas de Boletus edulis (una seta comestible), con un valor de 71 millones de dólares.
Pérez Moreno mencionó que además del alto valor del mercado internacional, el comercio al interior de los países constituye una derrama económica importante para las comunidades rurales y marginadas. “Se calcula que durante el pico de la producción, al mercado de la Merced llegan alrededor de 2.5 toneladas de especies silvestres”, informó.