Las ideas y propuestas para avanzar en las diferentes áreas de la física en nuestro país, y la importancia del trabajo interdisciplinario y de colaboración con otras áreas de la ciencia, fueron algunos de los temas abordados en la mesa: ¿Hacia dónde va la física en México?, realizada en el marco del LVI Congreso Nacional de Física que se celebra en San Luis Potosí, en la que participaron la doctora Julia Tagüeña y los doctores José Franco, Jorge Flores, René Asomoza, David Ríos y Jaime Urrutia Fucugauchi como moderador, todos ellos destacados investigadores en este campo del conocimiento.
Jorge Flores Valdés, coordinador general del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República (CCC), presentó los avances del proyecto ¿Hacia dónde va la ciencia en México, impulsado por el organismo que coordina, conjuntamente con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y la Academia Mexicana de Ciencias (AMC). Señaló que hasta ahora se han realizado 88 mesas de discusión en las que han participado más de 400 expertos en los distintos campos del conocimiento que se cultivan en México. Precisó que en 19 de estas reuniones se han tocado temas de interés para la física. La tarea consiste ahora, dijo, en priorizar y categorizar las propuestas que han surgido dentro de este ejercicio.
Una manera de hacerlo, explicó, es agrupándolas en las cinco metas generales del Plan Nacional de Desarrollo (PND), elaborado por el gobierno de la República. Las propuestas quedan enmarcadas en tres de ellas: “México con Educación de Calidad” (136 propuestas), “México Próspero” (23) y “México con Responsabilidad Global” (1).
En su exposición, el investigador del Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y ex presidente de la AMC, detalló algunas de las propuestas que han sido formuladas, y mostró algunos ejemplos durante su presentación, como la creación de un programa nacional de educación en matemáticas para niños, adultos y profesionales; crear centros de reclutamiento de nuevos talentos para la ciencia y la tecnología; impulsar la cooperación internacional; fortalecer los grupos de investigación en física cuántica; crear programas de formación de especialistas en nanotecnología, programas de investigación aeroespacial, sistemas complejos, altas energías, biomateriales, etcétera.
Entre las propuestas, apuntó, hay muchas orientadas a crear nuevos centros de investigación en diversos campos de la física. De los planteamientos que se han recopilado Flores Valdés destacó algunos de ellos como crear una Agencia Nacional de Evaluación de la Investigación y la Educación Superior, el experto explicó las bondades de una agencia de este tipo que correspondería al modelo que se sigue en otras naciones en las que incluso las instituciones más prestigiadas son objeto de una evaluación rigurosa.
Finalmente, explicó que en este momento se está realizando una revisión final, y las propuestas que se han recogido a través del Programa ¿Hacia dónde va la ciencia en México?, junto con las que han surgido de otros ejercicios como la Agenda Ciudadana de Ciencia, Tecnología e Innovación, realizado por la AMC y otras instituciones, y el llevado a cabo por el grupo de los 66, que lidera el rector de la UNAM y dio lugar al documento Hacia una Agenda Nacional en Ciencia, Tecnología e Innovación, se presentarán próximamente a diputados y senadores, además de que se planea una reunión con el presidente de la República.
Trabajo interdisciplinario y de colaboración
En su participación, el doctor René Asomoza Palacio, director del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), destacó que ante la carencia de una política de Estado en ciencia y tecnología, ésta se tiene que construir, por lo que destacó la importancia de que se realicen acciones participativas, pues de ellas pueden surgir líneas claras que pueden adoptarse en el país.
Asomoza, quien es además miembro de la AMC, dijo que en la actualidad la sociedad está viviendo situaciones inéditas, en campos como la propia física, las neurociencias, la biotecnología y la biología molecular, y hay un desarrollo tecnológico sin precedentes.
No obstante, señaló, hay un buen número de problemas no resueltos como el crecimiento de la población, el cambio climático, el abastecimiento de energía o las consecuencias de la contaminación ambiental sobre la salud. Destacó que mucho de los avances señalados se deben a la física y los retos que se presentan en diversas áreas se pueden enfrentar y resolver a través de esta ciencia. Asomoza Palacio identificó como los retos principales para el siglo XXI los de la energía y la salud pública.
Explicó que en el mundo actual se ha transitado de una investigación solitaria, a la creación de grandes grupos de investigación. Para lograr un impacto importante en la investigación científica y tecnológica, la estrategia a seguir debe ser el trabajo interdisciplinario y de colaboración, expresó. Como ejemplo se refirió a un caso de éxito: El CERN (siglas del Consejo Europeo de Investigaciones Nucleares), el cual es financiado por 20 Estados con una aportación de mil millones de dólares por Estado y por año, y ha realizado importantes contribuciones a la ciencia básica y aplicada.
En su intervención, destacó la participación mexicana en el proyecto que condujo al descubrimiento del Bosón de Higgs, especialmente a través de los proyectos ALICE y CMS, en el que intervinieron investigadores de instituciones como la UNAM, el Cinvestav, universidades públicas de Puebla, Sinaloa e Hidalgo y privadas como la Iberoamericana. Esta presencia se ha traducido en importantes logros científicos y tecnológicos para nuestro país y en formación de estudiantes.
Actuar de forma responsable
En una breve intervención, el doctor David Ríos, director del Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica, señaló que el siglo XX fue el de la física y el XXI será el de la biología.
Destacó la importancia del trabajo interdisciplinario de la física con otras áreas del conocimiento. Ríos relató que ha escuchado propuestas para crear más de 10 nuevos centros de investigación, pero no está seguro que todos ellos sean pertinentes, por lo que llamó a actuar con responsabilidad.