Al inaugurar la exposición Tonalá y Tlaquepaque. Una visión del Bajío, en el Museo Regional de Antropología Palacio Cantón, en Mérida, Yucatán, César Moheno, secretario técnico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), resaltó que dicha muestra forma parte del impulso que ha dado el Instituto a toda el área maya, donde ha invertido 447 millones de pesos en 2014, cifra que representa 160 por ciento más que en 2013.
En representación de Teresa Franco, directora general del INAH, destacó que este año el Instituto impulsa 78 proyectos de investigación y conservación en el área maya, conformada por los estados de Yucatán, Campeche, Quintana Roo, Chiapas y Tabasco, un número que a nivel internacional es seguramente inédito si de conocer una cultura se trata.
Moheno refirió que a los proyectos de investigación y conservación se suman 68 proyectos del Programa de Empleo Temporal que, en los cinco estados de la región, significan la creación de 346 mil jornales, sólo en el presente año.
Respecto del número de visitantes nacionales e internacionales a los 60 museos y zonas arqueológicas abiertos al público en esta área, dijo que de enero a junio del año en curso se han registrado tres millones 497 mil personas que pudieron admirar el arte y la grandeza de la cultura maya, de los cuales un millón 550 mil acudieron a los museos y sitios prehispánicos de Yucatán, “gracias a la alta calidad de los trabajos que realiza el personal del INAH”.
“Así es como cumplimos puntualmente con el mandato de impulsar, en el sistema educativo y cultural, la política pública del Estado mexicano para la investigación, conservación y difusión del patrimonio arqueológico e histórico de México”.
César Moheno resaltó que la cultura maya sigue viva en los más de 6.5 millones de niños, jóvenes, mujeres y hombres de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán. “Su cultura material, su cultura inmaterial y su cosmovisión forman parte entrañable e invaluable del patrimonio cultural de México y de la humanidad.
“Hablo de una cultura que hermana a los hombres y mujeres del área maya. Una región que comparte un patrimonio único, que es fuente vital de nuestra identidad y unidad como mexicanos, y que es además un valioso impulsor del desarrollo económico y social”.
Refirió que los mayas, al igual que otras antiguas culturas como las de Occidente, mantienen vivo el arte cerámico, “metáfora de lo efímero de la vida humana y a la vez de lo perenne del pensamiento y las obras que quedan como herencia y raíz para la posteridad”.
En este sentido, mencionó que la muestra Tonalá y Tlaquepaque. Una visión del Bajío, inaugurada la víspera en el Museo Regional de Antropología Palacio Cantón, “desde Jalisco, nos une a todos los mexicanos a través de las manos de sus creadores.
“Al admirar la belleza y profundidad conceptual que porta cada pieza de esta fabulosa exposición, recordamos el portento del arte cerámico que los mexicanos hemos heredado de nuestras culturas originarias y que también ha dado la vuelta al mundo gracias al trabajo y dedicación de los arqueólogos, historiadores y antropólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
“Hoy, al conocerla y admirarla, esta muestra sobre el arte de Tonalá y Tlaquepaque nos recuerda nuestro origen y la grandeza de las civilizaciones que le dan rostro al México de hoy. Con esta exposición el Instituto Nacional de Antropología e Historia refrenda su compromiso con Yucatán”, subrayó César Moheno.
La colección está conformada por 160 piezas que dan cuenta de la historia del barro en la región del Bajío y de las diferentes técnicas para la producción de objetos con este material, como son el bruñido, bandera, betus, canelo, alta temperatura y petatillo.
Como parte de la muestra se exhiben seis piezas del siglo XVIII, y el resto abarca desde principios del siglo XX hasta nuestros días, las cuales reflejan la magia y talento de los artesanos mexicanos.
Walther Boesterly, curador de la exposición y director del Museo de Arte Popular (MAP), de donde proceden alrededor de 80 piezas, comentó que la conservación de estas técnicas tradicionales ha sido posible gracias al amor de las familias, quienes las van pasando de generación en generación.
Las piezas proceden de los museos nacionales de la Cerámica en Tonalá y del Premio Pantaleón Panduro, en Tlaquepaque, así como del Museo de Arte Popular. Luego de su exhibición en Yucatán, la muestra se presentará en el Museo Regional de Guadalajara y en Tlaquepaque, Jalisco.
Giovana Jaspersen, directora del recinto yucateco, expresó que la muestra nos lleva a dos localidades alfareras de las más reconocidas de nuestro país. “Los pasillos se visten de nahuales, de águilas bicéfalas, de lunas y soles de barro, y de flores de Tonalá, que sirven como ejemplo para comprender la imaginería de esta cerámica”.
Añadió que el minucioso decorado ha sido pieza clave en el reconocimiento de estas obras, cuya calidad, no sólo técnica sino plástica y estética, es comparable con piezas maestras de la historia del arte.
En la inauguración de la muestra también estuvieron presentes Roger Metri Duarte, secretario de la Cultura y las Artes de Yucatán; el antropólogo Eduardo López Calzada, director del Centro INAH Yucatán, y Jorge Ezma Bazán, director del Instituto de Historia y Museos de Yucatán.
Tonalá y Tlaquepaque. Una visión del Bajío permanecerá en exhibición hasta octubre próximo en el Museo Regional de Antropología Palacio Cantón, ubicado en Paseo Montejo, en Mérida, Yucatán.