Por el desarrollo de trabajos y estudios relacionados con áreas protegidas federales, estatales, municipales, comunitarias o privadas, Víctor Sánchez-Cordero Dávila, director del Instituto de Biología (IB) de la UNAM, fue distinguido con el Premio a la Investigación Científica en Conservación Biológica, del Programa Volkswagen Por amor al planeta.

El reconocimiento, compartido con Mario González Espinosa, investigador de El Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR), destaca la integración de los enfoques teóricos y metodológicos con aportaciones conceptuales de amplio alcance. Además, recoge el legado histórico de las comunidades rurales e indígenas y su importancia para la conservación del capital natural de México.

El universitario explicó que las indagaciones están orientadas a evaluar, de manera cuantitativa y sistemática, la efectividad de las áreas protegidas existentes en el país, en términos de prevención de cambios de uso de suelo.

En los resultados de los estudios, algunos de ellos precursores a nivel mundial, se demostró que aproximadamente un 70 por ciento de las zonas decretadas con esta categoría son efectivas en este rubro, destacó.

Además, al analizar si el éxito de los espacios tenía relación con la categoría asignada, se determinó que las áreas naturales protegidas más eficaces son las Reservas de la Biósfera. "Esto demuestra que en México se pueden y deben conservar los recursos naturales en colaboración con la gente", puntualizó.

Enfoque novedoso

El universitario indicó que a la par de las indagaciones referidas, el grupo a su cargo estudió la necesidad de incluir estrategias de conservación fuera de las áreas protegidas.

Con los datos recabados, se detectaron zonas prioritarias, susceptibles de ser restauradas, para establecer modelos de redes de conservación que las conecten con las áreas protegidas decretadas, a fin de garantizar la máxima representación de la biodiversidad en un área mínima.

El experto subrayó que las dos líneas de investigación se conjuntaron en propuestas de redes de conservación. En los trabajos, se colaboró con organizaciones no gubernamentales y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, informó.

Respecto al reconocimiento otorgado, el universitario consideró que refleja la preocupación que existe en la sociedad mexicana por temas ambientales, en específico, en investigación en conservación biológica. En esta edición, se distinguen dos visiones complementarias: el enfoque teórico-metodológico, del grupo que dirige, y las aportaciones prácticas de González Espinosa, destacó.

El premio refleja la intensidad y calidad de la labor que realizan los universitarios, que se demuestra en diversas áreas y disciplinas. “Se lo dedico a mi familia, al instituto y a la Universidad, a la que le debo toda mi carrera y vida académica”, dijo.

Trayectoria

Sánchez-Cordero Dávila cursó la licenciatura en la Facultad de Ciencias de la UNAM y la maestría y doctorado en la University of Michigan, en Estados Unidos. Es investigador titular C de tiempo completo en el Instituto de Biología.

En 2009, recibió el Reconocimiento a la Conservación, que otorga el gobierno federal. Pertenece a las sociedades científicas de la American Society of Mammalogists, la International Federation of Mammalogists, Asociación Mexicana de Mastozoología A.C. (socio fundador), y The Southwestern Association of Naturalist. Es miembro de la Academia Mexicana de Ciencias.

Actualmente, es integrante del Consejo Nacional de Áreas Naturales Protegidas y del Consejo Técnico del Fondo de Áreas Naturales Protegidas; además de investigador asociado de la University of Kansas.