A pesar de mostrar un alto nivel de juego, jamás visto en una selección mexicana, el sueño de obtener el título mundial senior en Austria 2011, terminó para el conjunto mexicano, que fue superado por los representantes de Estados Unidos con apretado marcador de 7– 17.
El duelo inició reñido y con dominio de las defensivas, del lado estadounidense fue evidente la falta de acoplamiento entre pasador y receptores, mientras que por el conjunto azteca se dificultó el establecimiento del ataque terrestre. Esto propició que el primer cuarto se fuera sin puntos en la pizarra.
Al inicio del segundo periodo el conjunto de Estados Unidos tocó la puerta de las diagonales mexicanas, pero un cruce oportuno de Jorge ‘Pelón’ Valdez evitó la anotación y marcó la primera intercepción del partido, en contra del quarterback Cody Hawkins.
Lamentablemente para México, un mal centro generó un balón suelto de Rodrigo ‘Goofy’ Pérez, que colocó a los estadunidenses a 25 yardas de la anotación, lo que propició un intento de gol de campo de 41 yardas que Greggery Berkshire hizo bueno para abrir el marcador 0 -3.
Ante la anotación, México respondió con lo que parecía un buen ataque, el cual los llevó más allá de la mitad del terreno, pero que parecía finalizar con un castigo de rudeza innecesaria que los obligó al despeje, aunque durante la patada un castigo del conjunto de las barras y las estrellas les devolvió el balón y la posibilidad de obtener puntos. Esto no se logró, debido a la penetración defensiva.
Un descuido en el perímetro facilitó el trabajo para que Hawkins conectara su primer pase largo, con Alex Anderson, y dejara el ovoide a seis yardas de la anotación. La defensa mexicana brindó un gran esfuerzo, pero en cuarta oportunidad y centímetros para la anotación o el primero y diez, no logró evitar que DaShawn Thomas brincara sobre la línea para marcar seis puntos más, que con el extra dejaron la pizarra en 0-10, y así irse al descanso.
México inició la segunda mitad con una ofensiva que no fructificó y terminó con un despeje que fue bloqueado por el conjunto de azul, rojo y blanco, que colocó el balón en la yarda 45 de los mexicanos.
Los ajustes realizados durante el medio tiempo, permitieron que Estados Unidos brindara mayor eficacia en el ataque aéreo para dominar a la secundaria mexicana, la cual se lograba, hasta que en carrera por el centro, Estados Unidos soltó el balón para que éste fuera recuperado por México, en su propia yarda 10.
El equipo de verde y blanco no logró avanzar el balón, y mediante un buen despeje envió a los Estados Unidos hasta su yarda 20. Para luego también verse obligados a entregar el balón.
Una conexión de más de 40 yardas, por la vía aérea, entre Rodrigo Pérez y José Antonio Alfonso permitió al conjunto azteca llevar el ovoide hasta la yarda 15, para que más tarde José Reyes, en carrera de dos yardas, marcara los primeros seis puntos para México, y con el extra acercar el marcador a 7-10.
El cuarto periodo inició con tan sólo una diferencia de tres puntos en la pizarra, un equipo mexicano que mostraba contar con la capacidad para sacar el triunfo y un conjunto estadunidense sorprendido por la resistencia encontrada.
Mediante un ataque que combinó juego aéreo y terrestre, una carrera de una yarda devolvió la ventaja de 10 puntos a los actuales monarcas mundiales, para colocar los números 7-17, a nueve minutos del final.
Un nuevo balón suelto de los mexicanos, permitió que Estados Unidos iniciara el ataque dentro de la yarda 40 del territorio del conjunto dirigido por el coach Raúl Rivera. El resultado en esta ocasión no les fue favorable, al errar un gol de campo de 44 yardas.
Dos capturas de quarterback, sobre Bruno Márquez, con menos de dos minutos en el reloj, cerraron la actuación del equipo mexicano en la primera ronda del certamen al decretar el triunfo de los Estados Unidos, por pizarra de 7 -17.
Ahora la selección mexicana deberá esperar rival para buscar el tercer puesto mundial, el próximo sábado en Viena.