La Federación Mexicana de Medicina del Deporte realizó en conjunto con Life Sciences Institute, la serie de conferencias Presencia Académica La Verdad de la Ciencia en Tus Manos, exposiciones dedicadas al mejor conocimiento del tema de la obesidad en México.
Fueron tres sesiones en que se desarrollaron temas de salud pública en el país y que tuvieron como objetivo, aclarar realidades y mitos sobre este problema de salud que ya es una epidemia en México.
El doctor Guillermo Meléndez, de la Fundación Mexicana para la Salud, presentó, mediante un video, el tema Obesidad Infantil en México y en el que se estableció la magnitud de este problema que ya alcanzó características alarmante porque niños de 10 u 11 años tienen ya enfermedades propias de personas de 30 o más años. “Pensar que este problema es culpa del mercado o del libre comercio es un error, la obesidad infantil es la reunión de varios factores que actuando juntos, han producido esta epidemia. Se pueden señalar como causas el crecimiento de la ingesta de alimentos industrialmente preparados.
“El cambio de hábitos de alimentación, la disminución alarmante de actividad física en los niños, el poco conocimiento de los padres sobre las dosis de calorías que deben ingerir los niños y la cantidad de alimentos tomando en cuenta su actividad física, el crecimiento de las porciones que se ofrecen en los alimentos industrializados”.
Meléndez expresó que todo esto ha actuado para producir un problema drástico que inicia en cuanto los infantes comienzan a socializar y entran al sistema educativo. En 2000, un 18.8 por ciento de la población infantil tenía ese problema, luego de 2006, el porcentaje subió a 26.8, lo que habla del tamaño del conflicto.
Carmen Ruiz Monroy, especialista en nutrición, desarrolló el tema De Sedentario a Físicamente Activo, Un Cambio De Vida en el que estableció que es necesario que la gente tenga como mínimo, 30 minutos de actividad física constante al día para evitar la obesidad y las enfermedades que se asocian con esta epidemia.
“El ser humano por sí mismo no es gordo, es el camino que hemos seguido en nuestra evolución lo que nos ha llevado al Mono Obeso. El comer sano no basta, tenemos que realizar actividad física y esto puede aumentar nuestra perspectiva de vida en unos siete años.
“Lo mínimo a realizar todos los días, o cinco por lo menos, son 30 minutos de actividad física constante, sin pausas, como puede ser caminar, correr o nadar, y si se quiere entra en un programa de actividad física más complejo, se necesita determinar por un especialista el grado de esfuerzo que nuestro cuerpo puede hacer, y no copiar recetas que a otras personas supuestamente les ha funcionado”.
La doctora Rebeca López-García presentó el tema Mitos y Realidades de los Edulcorantes no Calóricos, sustancias que han sido señaladas como dañinas para el ser humanos sin tener prueba científica el respecto.
López-García estableció que sustancias sustitutas del azúcar como Sacarina, Ciclamato, Aspartane, Sucralosa o Estevia, no son por sí mismas dañinas.
“Es la cantidad de la ingesta lo que hace la diferencia y se deben tomar en un estilo de vida sana y dieta. Una sustancia de estas puede ser dañina si se tomara, por ejemplo, diariamente 24 litros de refresco dietético.
“La dosis se establece mediante estudios muy completos que han demostrado que las cantidad utilizada en varias bebidas no es dañina, además, cada sustancia responde diferente en cada organismo, entonces, en dosis bajas y bien controladas, los edulcorantes son benéficos para evitar la obesidad”.
Esta serie de conferencia fue parte de un tour que se presentó en varias partes del país.