En forma conjunta, Eduardo Cacho, director de Operaciones del Club Universidad, y César Flores, titular de Protección Civil de la UNAM, dieron a conocer las medidas de protección civil integral adoptadas en el Estadio Olímpico Universitario, una vez que se retiraron las mallas ciclónicas que rodean la cancha y que incluyeron la colocación de rampas de acceso.
“Es muy importante recordar que para lograr el éxito en esta labor se requiere de la participación de la afición junto con la gente que opera el estadio, básicamente los brigadistas. Tenemos que hacer una gran labor educativa y cultural”, señaló Cacho.
Por su parte, Flores informó que en la elaboración de este nuevo esquema también participaron las áreas de protección civil del Gobierno del Distrito Federal y de la Delegación Coyoacán, que cotidianamente forman parte de los operativos en el estadio.
De acuerdo con Flores, la evacuación de la parte alta del estadio, que se realiza a través de los túneles, toma entre siete y ocho minutos, mientras que en la parte baja significa minuto y medio.
También detalló que en atención a las modificaciones solicitadas por la Federación Mexicana de Futbol a todos los estadios, se habilitaron nueve accesos de la tribuna baja hacia la cancha, los cuales se utilizarán “de manera extraordinaria en casos excepcionales”.
Y Cacho complementó: “El estadio tiene características concretas que nos obligan a ir más hacia las salidas con el uso de los túneles, que hacia adentro del inmueble”.
También señalaron que será muy importante que las escaleras y pasillos permanezcan libres. Por ello, sólo se permitirá el acceso de un máximo de 55 mil aficionados.
Otro asunto que dieron a conocer es que estará prohibido tomar fotografías, realizar actividades de animación y arrojar objetos a la cancha, y quien incumpla con estas restricciones será remitido a las autoridades correspondientes.
El nuevo esquema significó a la UNAM un gasto de un millón 200 mil pesos, con la idea de privilegiar al máximo todas las medidas de seguridad.
Cacho externó que el esquema va más dirigido “a la parte amable, a conducir la conducta de la gente. Vamos a hacer un esfuerzo didáctico e incluso nos reuniremos con los grupos de seguidores para lograr su participación y compromiso. Será una labor de prevención y cultura que intentaremos platicar con todos las partes involucradas”.