En un juego en el que se rompieron varios récords, entre ellos el que Pumas haya logrado el primer bicampeonato desde 1967 y el campeonato 37 en la historia de la Horda Dorada y que sólo tuvo emotividad los últimos 6 minutos del partido, cuando los Tigres se acordaron de que venían por un campeonato y faltando un minuto estuvo a punto de empatar el juego, los Pumas se coronaron bicampeones al derrotar a los Auténticos por 21 a 24.
Sin lugar a dudas Jerónimo Arzate (18) fue pieza fundamental en el triunfo de los Pumas, y nominado con justeza el “Jugador más Valioso” por la prensa especializada, en un partido claramente dominado por las defensivas, que permitieron menos de 300 yardas de ofensiva total combinada a las ofensivas de ambos equipos.
Los Pumas salieron a jugar agresivamente, en tonto que los felinos de Nuevo León dejaron mucho que desear al manifestar una ofensiva pasiva, con jugadas repetitvas, incluso con 2 bloqueadas de patada de despeje, que permitieron a los Pumas que su defensiva se luciera en esta sexta ocasión que se repite este encuentro por pelearse el título de campeonato de la conferencia de Los 8 Grandes.
La primer jugada ofensiva del partido prometía algo muy diferente, cuando Max Villarreal Maldonado (12) completa un espectacular pase de 34 yardas con Alejo González Treviño (9), pero después de eso el ataque regiomontano sólo pudo avanzar 5 yardas más, y en cuarto down el despejador Ricardo Aguilar Medellín (14) efectuó una patada de escasas 11 yardas, que dejó a los Pumas en su yarda 25, y éstos no perdonaron, pues en su mejor serie ofensiva del partido enfilan hasta la anotación, en un pase de 16 yardas de José Miguel Chávez Mess (19) a Herminio Rojas Arellano (15), para que el punto extra de Alan Paoli García (48) ponga el marcador 7-0 a favor de los capitalinos.
Los Tigres son rápidamente detenidos, y el intento de despeje de Jesús Villanueva García (37) es bloqueado por Jerónimo Arzate (18) y recuperado por Josafat Del Valle Martínez (7), sobre la yarda 6 de terreno neoleonés, pero su defensiva demuestra estar a la altura al detener a los locales en tres downs, y el intento de gol de campo de escasas 25 yardas totales es bloqueado por Daniel Carrete Landeros (11) y recuperado por Erick Cázares Villalobos (24), quien deja a los visitantes sobre su propia yarda 15.
Luego de ganar apenas 16 yardas, un nuevo despeje de Villanueva es de nueva cuenta bloqueado por Arzate y cubierto por Del Valle sobre la yarda 33 de terreno tigre, y esta vez los Pumas no perdonan, anotado en los albores del segundo cuarto con una carrera de una yarda del corredor asturiano Pablo Caso González-Juliana (45), para despegar a los Pumas 14-0.
En el tercer cuarto, luego de un buen regreso de despeje del ibérico Kevin Gramage Medina (43), los Pumas se despegan de manera que parecía definitiva, cuando Chávez Mess pone un perfecto pase por el centro del campo en las manos de Óscar De la Concha Hernández (16), para touchdown de 47 yardas totales que amplía la ventaja local a 21-0.
Pero cuando todo parecía definido, a mediados del último cuarto los regios viven su mejor momento, cuando en cuarto down logran evitar la blanqueada con un pase de una yarda de Villarreal para Gustavo Padilla Pontvianne (6) que los acerca 21-7.
Apenas en la segunda jugada ofensiva de los Pumas, Chávez Mess pierde el ovoide y Adrián Martínez Armendáriz (2), recupera para la UANL sobre la yarda 14 del territorio local, lo que aprovechan para anotar en carrera de 3 yardas de Rubén Martínez Bernal (35), para colocarse “a tiro de piedra” de una igualada que habría sido milagrosa ya que quedan 21-14.
Sin embargo, la última serie ofensiva de los Tigres se atoró sobre la yarda 25 de terreno puma, y luego de un castigo por retraso de juego, Villarreal se desespera y busca el touchdown en lugar del primer down, mandando un “globito” sobre doble cobertura, lo que Vladislav Saranedialkov Ávila (25) aprovecha para interceptar , lo que mata las aspiraciones de los norteños y decreta el campeonato nacional número 37 en la historia de la Universidad Nacional.