Al cierre de la semana del 15 al 19 de abril, las reservas internacionales del Banco de México (Banxico) registraron una disminución de 716 millones de dólares, lo que representó la tercera semana consecutiva con descenso.

El saldo de las reservas internacionales fue de 165 mil 627 millones de dólares, resultado que implicó, un crecimiento acumulado, respecto al cierre de 2012, de dos mil 112 millones de dólares.

De acuerdo con el estado de cuenta semanal del instituto central mexicano, la reducción fue resultado principalmente del cambio en la valuación de sus activos internacionales.

Informó que la base monetaria, compuesta por billetes y monedas y depósitos bancarios en cuenta corriente en el Banco Central, disminuyó siete mil 439 millones de pesos y alcanzó un saldo de 766 mil 448 millones de pesos.

La cifra implicó una variación anual de 5.7 puntos porcentuales y significó una disminución de 79 mil 571 millones de pesos en lo que va de 2013, comportamiento que se estima congruente con el ciclo y la estacionalidad de la demanda por base monetaria, al considerar los efectos del proceso electoral del año pasado.

En este periodo, el Banco de México también realizó operaciones de mercado abierto con instituciones bancarias para compensar una contracción neta de la liquidez por 57 mil 328 millones de pesos.

Esta liquidez fue resultado de una contracción derivada del depósito de recursos en la cuenta de la Tesorería de la Federación y otras operaciones por 64 mil 767 millones de pesos.

Además, una expansión por siete mil 439 millones de pesos, que se desprende a una menor demanda por billetes y monedas por parte del público.

Se consideran operaciones de mercado abierto a aquellas transacciones que suceden en el mercado de dinero a iniciativa del Banco de México para contraer o expandir la oferta de activos.

En estas interviene el banco central, mediante subastas para ofrecer créditos o recibir depósitos, con la compra o venta de títulos gubernamentales, ya sea en directo o con reportes.

El instituto central tiene por norma general ajustar diariamente la oferta de dinero primario a través del manejo de su crédito interno neto, de forma tal que corresponda a la demanda de la base.