En el Coloquio Internacional “BRICS. El Difícil camino entre escepticismo y el asombro” y en el segundo y último día de trabajo, diputados y expertos analizaron las estrategias implementadas por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica para que sus economías registren rápido crecimiento económico.
El acrónimo BRICS tiene su origen en la correduría Goldman Sachs y éste cambiaría a BRICSM ya que México podría formar parte de este grupo de naciones que además de objetivos económicos tienen también propósitos políticos, estableció el especialista hindú Shrawan Nigam al dictar la conferencia “El papel de la agricultura en la economía India”.
Opinó que a los BRICS se les percibe como salvadores potenciales de las economías emergentes o en desarrollo; no obstante que también experimentan contradicciones como el tener ciertos porcentajes de población pobre y desempleada y aspectos sociales por abatir, como la corrupción y adicciones.
Informó que el Producto Interno Bruto (PIB) de la India crece a un ritmo del 8 por ciento en la última década.
Mencionó que es uno de los países más poblados del mundo, con mil 200 millones de habitantes; se estima que entre 2035 y 2040 superará a la población de China. Entre 237 y 420 millones son pobres, y de acuerdo al Banco Mundial (BM) 300 millones viven con menos de un dólar al día.
Destacó que la agricultura contribuye con el 14 por ciento del PIB nacional y su producción agrícola se incrementa en 4 por ciento, lo que da garantía alimentaria a su población, gracias a que se sigue una política de precios de garantía. El gobierno ha invertido en investigación y asistencia tecnológica de semillas.
El investigador brasileño Luciano de Assis Pereira, al participar con el tema: “Brasil: la fábrica de alimentos del siglo XXI”, enfatizó que debe su éxito a apertura de mercado, al impulso de productores emprendedores, inversión en tecnología y uso de insumos agrícolas.
Indicó que esta nación latinoamericana se encamina a ser uno de los productores más poderosos de alimentos, entre otras razones porque se ha especializado en la obtención de alimentos de manera sustentable, donde destaca el etanol como combustible para automóviles a base de caña de azúcar.
El catedrático de la UNAM, especializado en temas de Rusia, Pablo Telman Sánchez, dictó la conferencia “El modelo económico de Rusia durante la última década. Sus modificaciones y adaptaciones”.
Dijo que esa nación tiene claro que no regresará al comunismo, continuará su sistema capitalista con asistencia social que desde 2003 se fundamenta en cuatro programas: agricultura, educación, vivienda y salud.
En 2004 el gobierno creó el Fondo de Estabilización, formado con recursos provenientes de los altos precios del petróleo y en 2006 alcanzó los 156 mil millones de dólares.
Estimó que el grupo BRICS no es necesario para Rusia, ya que tiene diversificados sus mercados, especialmente con Europa.
Expuso que entre las debilidades que padece este país figuran el envejecimiento de su población, su cercanía con China, el ser importador de materias primas y su mayor lastre es la corrupción.
En su momento, Juan González García, especialista de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), adelantó que entre el 2017 y 2020 China será la primera potencia mundial con crecimientos económicos que promedian 8 por ciento de su PIB y se convertirá en la “fábrica del mundo”, no obstante que registra entre 13 y 14 por ciento de su población en extrema pobreza.