*Cruda realidad y utilización social
Además del hambre y la hepatitis que sufren los tarahumaras en Chihuahua, ahora se agregó un nuevo mal: la sarna.
El vicario de la Sierra Tarahumara, Fernando Martínez, abordó al gobernador del Estado, César Duarte, durante una entrega de alimentos en la comunidad de Cusarare y le pidió ayuda urgente para atender este otro mal que aqueja a la etnia rarámuri.
De acuerdo con el sacerdote, hay poco más de una docena de casos de niños que padecen sarna, algunos de los cuales presentan deformidad facial.
Luego de solicitar el apoyo oficial al mandatario estatal, el padre Martínez dijo que el problema del hambre entre los tarahumaras es muy grave y que puede ponerse peor en el presente año de continuar la sequía.
Todos los niños padecen desnutrición, los hombres y mujeres sufren de alcoholismo, las mujeres embarazadas tienen anemia y recientemente se descubrió un brote de hepatitis en un albergue de Sisoguichi, en el municipio serrano de Bocoyna.
En este mismo municipio, ahora se reveló un brote de sarna en niños tarahumaras, provocado por la falta de agua en la región y de que los infantes duermen junto a sus perros para darse calor.