La Comisión de Salud analiza exhortar a la secretaría del ramo a que modifique la normatividad sobre el acceso a la prueba y entrega de resultados del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH/Sida), a fin de que las y los jóvenes de 12 a 18 años puedan solicitarla con o sin la autorización del padre, madre, tutor o representante legal.
A través de un punto de acuerdo, la secretaria de la Comisión de Juventud, diputada Crystal Tovar Aragón, argumentó que México ocupa el tercer lugar en el continente americano en prevalencia de VIH, sólo precedido por Brasil y Estados Unidos.
Refirió que según datos de la encuesta “Situación de la familia y la Infancia en México”, realizada por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública, 15 por ciento de la población entrevistada entre 12 y 17 años declaró tener una vida sexual activa; de los cuales, 84 por ciento la iniciaron a los 15 años o antes y 47 por ciento ha tenido dos o más parejas.
También destaca que un amplio sector de esta población no tiene prácticas sexuales seguras y ha padecido enfermedades y embarazos no deseados. Además, entre los adolescentes sexualmente activos, 50 por ciento no utiliza anticonceptivos; 25 por ciento no cuenta con métodos para evitar enfermedades venéreas, y 30 por ciento tuvo alguna enfermedad de transmisión sexual.
Crystal Tovar subrayó que en México, como en la mayoría de los países en desarrollo, la distribución desigual de ingresos, la migración, falta de empleo y de oportunidades de vida, el estigma, la discriminación, la homofobia, la desigualdad de género y la falta de educación sexual, entre otros factores, aumentan la vulnerabilidad de la población para contraer VIH y desarrollar Sida.
Resaltó que la infección producida en los seres humanos por el VIH continúa en aumento en el mundo, fenómeno del que México no es una excepción y, por tanto, es un problema de salud pública a nivel mundial.
Mencionó que es obligación de todos los servicios que integran el Sistema Nacional de Salud, ofrecer la prueba de detección del VIH a todas las personas de manera voluntaria y confidencial para el cuidado de su organismo.
“Con el acceso oportuno y sin restricciones al derecho a la salud para las y los jóvenes, incluidos los menores de edad que están o hayan estado en situación de riesgo, y para los que viven con el VIH, pueden detectar a tiempo la enfermedad y realizar acciones para no propagar el contagio y acceder a los servicios médicos de atención”, consideró.
Precisó que actualmente la Norma Oficial Mexicana NOM-010-SSA2-2010 para la prevención y el control de la infección por virus de la inmunodeficiencia humana, establece que cuando el paciente es menor de edad, se solicita información a través del padre, madre, tutor o representante legal.
Por ello, Tovar Aragón propuso exhortar a la Secretaría de Salud a que a la brevedad modifique la NOM-010-SSA2-2010, a fin de que la aplicación de la prueba y la entrega de resultados se den a menores entre los 12 y 18 años que estén o hayan estado en situación de riesgo, logrando con ello concientizar y prevenir sobre la posible infección, y evitando la transmisión y propagación de la epidemia.
Consideró necesario que la postura institucional sea accesible, inclusiva y no limitativa, al ser algunos jóvenes activos sexualmente, y siendo las prácticas sexuales de las principales vías de riesgo. “La minoría de edad en estos casos no debe ser limitante para acceder a la prueba de detección, con la respectiva consejería que reciba la persona a la entrega del resultado, según lo indica la Norma”, señaló.