La Mesa Directiva del Senado de la República y la Junta de Coordinación Política reprobaron la agresión verbal y física que sufrió el senador del Partido de la Revolución Democrática, Alejandro Encinas Rodríguez, este lunes 10 de noviembre en Jalapa, Veracruz, por un grupo de manifestantes, al tiempo que solicitaron fincar responsabilidades a los autores materiales e intelectuales.
El presidente del Senado, Miguel Barbosa Huerta, expresó que la violencia es inadmisible en un Estado de derecho y un acto injustificable que afecta la condición humana de un ciudadano y un servidor público.
Señaló que el respeto a la integridad física y a la dignidad de las personas es un valor fundamental sobre el que se hace posible la convivencia social; por ello es deber de todos respetar el espacio de acción personal y social de los demás.
Manifestó que quienes cometieron este acto cobarde, de notoria ilegalidad, deben ser puestos de inmediato a disposición de las autoridades ministeriales y judiciales competentes, pues son evidentes acciones que la ley califica como delitos.
El ejercicio del derecho fundamental a la expresión de las ideas no debe, bajo ninguna circunstancia, ser objeto o causa de ataque a la integridad de las personas, por lo que acciones de esta naturaleza no hacen sino atentar contra los derechos y las instituciones, manifestó.
El pronunciamiento se llevó a cabo con fundamento en los artículos 37, 44 y 45 del Reglamento del Senado de la República. “Las y los senadores de la República expresamos nuestra solidaridad con nuestro compañero senador Alejandro Encinas Rodríguez, y hacemos un respetuoso y enérgico llamado para que este tipo de acciones deleznables, no se repitan bajo ninguna circunstancia”, reiteró.
Hizo un llamado a las autoridades estatales, federales y del Distrito Federal a implementar los mecanismos que garanticen velar por el fuero de las y los senadores y de la inviolabilidad del recinto legislativo, así como del personal de la institución de manera que se procuren condiciones que permitan el desarrollo de las actividades legislativas.
El senador Alejandro Encinas Rodríguez señaló que la provocación y violencia no son la vía para dirimir las controversias y conflictos entre los ciudadanos. La provocación en momentos de tensión y crispación política como el que se vive en todo el país, reclaman y exigen un cambio político para recuperar la normalidad democrática, señaló.
Agregó que el provocador busca distraer la atención de los problemas centrales que es el esclarecimiento de los hechos de barbarie que se vivieron en Iguala y las agresiones de que fueron objeto estudiantes normalistas de Ayotzinapa. “Queremos conocer la verdad” y por más provocaciones que pretendan, no se podrán minimizar las grandes manifestaciones por la zozobra y los hechos lamentables por los que atraviesa el país.
Si no nos amedrentamos en los tiempos difíciles cuando estaba la proscripción y la represión, menso nos vamos a amedrentar contra pequeños provocadores que no tienen conciencia que no ven el daño que le están haciendo al país, puntualizó.
Senadores de todas las fuerzas políticas condenaron los hechos violentos en contra del legislador, al tiempo que expresaron su solidaridad y reconocimiento al perredista. Coincidieron en que las diferencias deben encausarse por medios que no vulneren la seguridad ni pongan en riesgo la integridad de cualquier miembro de la sociedad.
En este sentido la senadora Blanca Alcalá Ruiz y el senador Francisco Yunes Zorrilla, del PRI, hicieron un llamado a las autoridades a realizar las investigaciones a fondo para deslindar responsabilidades. Estamos obligados a hacer un alto en el camino “porque las cosas no vienen bien” y las expresiones violentas no deben prevalecer por temas coyunturales.
Desde el Senado de la República estaremos pendientes a que se resuelvan las investigaciones, indicó Yunes Zorrilla.
El senador del PAN, Javier Corral Jurado, indicó que se debe rechazar cualquier tipo de violencia por lo que hay que estar atentos, investigar y llegar a las últimas consecuencias frente a hechos que “quieren llevar a los ciudadanos pacíficos a confundirlos con los grupos violentos, como lo ocurrido el pasado sábado en Palacio Nacional”.
Dijo que si bien se debe condenar los hechos se requiere darle seguimiento a los acontecimientos, de lo contrario las manifestaciones con tintes de violencia van a escalar.
Sus compañeras de bancada Luisa María Calderón y Laura Angélica Rosas, urgieron a recobrar la gobernabilidad y “enderezar” las instituciones de seguridad a través de mesas de trabajo para evitar que se desborde la violencia. Consideraron que sí debe haber protesta pero sin agredir personas e instituciones.
La senadora Dolores Padierna Luna, del PRD, condenó los hechos de violencia y expresó su solidaridad a su compañero de fracción. Dijo que las investigaciones que se desarrollen deben deslindar responsabilidades, además de buscar el restablecimiento de condiciones de gobernabilidad.
El senador del PVEM, Gerardo Flores Ramírez, hizo un llamado a no especular debido a las circunstancias por las que atraviesa el país, “también llamamos a no alentar los signos de violencia”, por lo que se requiere llegar a acuerdos para construir políticas que lleven a la paz y bienestar social.
La senadora Layda Sansores San Román, del PT, reprobó los hechos cometidos por un grupo de manifestantes en Veracruz, sin embargo la violencia, dijo, es aún más reprobable cuando viene del Estado como lo ocurrido en el Zócalo capitalino el pasado sábado posterior a la manifestación por los hechos ocurrido en Ayotzinapa, Guerrero.