El Comité y el Centro de Estudios de Derecho e Investigaciones Parlamentarias de la Cámara de Diputados, organizaron el seminario “Actualidad y perspectiva de la distribución de competencias: federación, estados y municipios”, para analizar la viabilidad de reformar el sistema de distribución de competencias del federalismo mexicano.
El director general del Centro de Estudios de Derecho e Investigaciones Parlamentarias, César Becker Cuéllar, expresó que por la relevancia política, administrativa, económica y social del federalismo, es necesario analizar si se actualiza el sistema de distribución de competencias establecidas en la Constitución.
Con el seminario que se realizará hasta el jueves 30 de junio, dijo, se busca construir una memoria que contribuya a integrar la información que el devenir del federalismo mexicano exige. “De ese análisis se plantea entender y aplicar a cabalidad las distintas competencias que asignan las leyes a los tres órdenes de gobierno”.
Las temáticas que serán abordadas son: salud; ecología y medio ambiente; civil y mercantil; cultura, educación y tecnología; recursos hidráulicos y desarrollo urbano; fiscalización; comunicaciones; desarrollo económico; fiscal; penal; desarrollo social; justicia y seguridad, así como la visión municipal en el sistema de distribución de competencias.
Respecto del tema de salud, el diputado Julián Francisco Velázquez y Llorente, del grupo parlamentario del PAN, señaló que con la creación del Seguro Popular se dio impulso a la cobertura universal y a la homologación en la calidad de los servicios. Además se planteó la necesidad de realizar la separación de funciones de manera que dé pie a la creación de un sistema único de salud en el país.
Propuso que no sea el Estado el que ofrezca los servicios mediante un monopolio público y se limite a asegurar el acceso universal y equitativo a servicios prioritarios de calidad aceptada. “La producción de los servicios puede abrirse a un mayor pluralismo y competencia con una mezcla de prestadores públicos y privados que permita contener los costos y satisfacer a los usuarios”.
Planteó tres propósitos que deben guiar el sistema de salud: equidad, calidad y eficiencia. “De nada serviría que se ampliará el acceso a los servicios si no se asegura su calidad, y para lograrlo el sistema de salud debe preocuparse por la eficiencia en la asignación de los recursos”.
Luego de la inauguración, a cargo del secretario de Servicios Parlamentarios de la Cámara de Diputados, Emilio Suárez Licona, el magistrado del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, Carlos Fernando Matute González, hizo votos para que a partir de un andamiaje analítico de las distintas facultades del federalismo, se pueda generar una mejor relación entre los estados y la federación.
Dijo que el reto es buscar cómo darle mayor bienestar a la colectividad, a través de mejorar las condiciones de los individuos y de generar orden en el gasto de las entidades federativas, puesto que las estructuras administrativas de los estados han crecido rápidamente en los últimos 30 años en cantidad y calidad.
Mientras que las estructura federal, puntualizó, es demasiado grande para hacerla eficiente como se quisiera, “no se pueden atender los problemas de la República a través de la desconcentración de funciones que lleven a cabo las delegaciones de las distintas dependencias, hay que hacer una verdadera descentralización de facultades a las entidades federativas con elementos de control o de homogeneidad del manejo de gasto”.
José Luis Leal Sanabria, presidente del Colegio de Jalisco, indicó que el concepto de metrópoli carece de personalidad constitucional, ya que el artículo 115 de la Carta Magna sólo considera al municipio libre como base de la división territorial de las entidades federativas y de su organización política y administrativa.
Precisó que para el desarrollo de las conurbaciones, lo conveniente es la conformación de gobiernos metropolitanos como parte de su evolución política, social y económica. Resaltó que el rezago de las ciudades mexicanas en los índices de competitividad mundial corresponde con el modesto desarrollo económico experimentado por el país y la persistencia de carencias de infraestructura y equipamiento de las metrópolis.
El académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, Fernando Pérez Correa, consideró que los gobernadores no están satisfechos con el régimen actual de distribución de competencias entre la federación y los estados.
“Hay un repudio de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) a las condiciones actuales, como el abandono en la descentralización porque los recursos de la política de desarrollo agropecuario y de desarrollo social siguen centralizados, aunque son políticas que están teóricamente descentralizadas”, agregó.
Señaló que el federalismo no es una forma de división de poderes, “es una forma de Estado, no de gobierno. Es una forma de distribución del poder y muchas de las discrepancias contemporáneas son en el esquema de distribución del poder en México”.