Tamaulipas, Quintana Roo, Veracruz y Baja California tienen el más alto riesgo costero, mientras que con medio riesgo se encuentran Tabasco, Campeche, Sinaloa, Baja California Sur, Michoacán y Guerrero, donde, a excepción de los dos últimos, la peligrosidad supera a la vulnerabilidad.

Así lo reveló el Índice de Riesgo Costero elaborado por los investigadores Georges Seingier e Ileana Espejel, de la Universidad Autónoma de Baja California, quienes demostraron en sus estudios que a nivel interno, cada estado presenta un índice de riesgo variable, pues no todos los municipios costeros de un estado con riego alto están en ese nivel de vulnerabilidad.

En ese sentido, Tamaulipas y Veracruz tienen la mayoría de municipios con riesgo costero, superando la media, 89 y 71 por ciento respectivamente.

Por ello consideran que la planeación de crecimiento de estos lugares se debe considerar la vulnerabilidad, que depende totalmente de voluntades políticas y acciones netamente humanas y la peligrosidad natural costera.

La clasificación de riesgo costero tiene la intención de ubicar los estados más vulnerables y disminuir esta condición; además de aportar la base para inhibir el crecimiento desordenado, con consecuencias nocivas para el medio ambiente y poco sustentables en estos sitios. También se limitaría el crecimiento de desarrollos turísticos y portuarios en los estados del Golfo de México y Baja California.