La Dirección General de Servicios de Documentación, Información y Análisis (DGSDIA) de la Cámara de Diputados reveló que de enero 2007 a diciembre 2012, la gasolina Premium se incrementó en 36.82 por ciento, la magna en 59.91 y el diésel en 94.94 por ciento.
En el “Análisis de los precios y de los subsidios a las gasolinas y el diésel en México, 2007-2012”, precisó que en ese lapso, la Premium pasó de 8.31 a 11.37 pesos por litro; la magna de 6.76 a 10.81; y el diésel de 5.73 a 11.17.
Detalló que durante ese periodo, el precio de la gasolina Premium ha sido más barato en México que en Estados Unidos por 1.11 pesos por litro, aun cuando se autorizaron 36 deslizamientos mensuales en los precios internos: 22 de 4 centavos, siete de 5 centavos, cuatro de 9 centavos y uno de 6, otro de 7 y uno más de 8 centavos por litro.
Además, agregó, el precio pasó de 9.66 a 11.37 pesos por litro, representando un incremento de 1.71 pesos por litro, equivalente al 18 por ciento respecto al precio vigente en enero de 2010.
Respecto a la gasolina Magna, de diciembre 2009 a diciembre 2012, su precio promedio ha sido más barato en México que en Estados Unidos por 1.28 pesos por litro, a pesar de los 36 deslizamientos mensuales en los precios internos, 22 de 8 centavos, 13 de 9 centavos y uno de 5 y 11 centavos por litro, respectivamente.
La DGSDIA detalló que el precio de este petrolífero pasó de 7.77 a 10.81 pesos por litro, representando un incremento de 3.04 pesos por litro, equivalente al 39.12 por ciento respecto al precio de enero 2010.
En cuanto al diésel, abundó, su precio promedio ha sido más barato en nuestro país que en la nación vecina por 2.23 pesos por litro, incluso cuando en este periodo tuvo 36 deslizamientos mensuales en los precios internos, 22 de 8 centavos, 13 de 9 centavos y uno de 7 centavos por litro.
Su precio, resaltó, transitó de 8.24 a 11.17 pesos por litro, representando un incremento de 2.93 pesos por litro, equivalente al 35.56 por ciento respecto al precio vigente en enero de 2010.
En el documento, resaltó que el precio de la gasolina Premium en México mantiene un subsidio de 46 centavos por litro, respecto al registrado en la Costa Golfo de los Estados Unidos, puesto que los consumidores nacionales lo pagan a 11.37 y en aquel país a 11.83 pesos por litro.
El costo de la gasolina Magna en nuestro país, afirma, está prácticamente igualado a la que pagan los consumidores norteamericanos. El subsidio se estimó en 05 centavos por litro, puesto que los nacionales lo compran en 10.81 y en aquella nación a 10.86 pesos por litro.
El precio del diésel mantiene un subsidio de 2.12 pesos por litro respecto a lo que pagan los consumidores de aquel país, puesto que localmente lo pagan a 11.17 y en aquel país a 13.29 pesos por litro.
Resaltó que si se mantiene el mismo ritmo de deslizamiento mensual seguido durante 2012, donde el precio de la gasolina premium registró seis incrementos de 5 centavos por litro, tres incrementos de 9 centavos por litro y uno de 6, 7 y 8 centavos por litro, al cierre del 2013 el costo de este petrolífero será de 12.15 pesos por litro, es decir 78 centavos más caro que lo observado al cierre de 2012.
En el caso de mantener el mismo ritmo de deslizamiento mensual del precio de la gasolina magna que el ejecutado durante el 2011, equivalente a doce deslizamientos de 9 centavos por litro, el precio se incrementará en 1.08 peso por litro al año, a este ritmo, para diciembre de 2013 los consumidores mexicanos pagarían el litro en 11.89 pesos.
Si el Gobierno mantiene el mismo ritmo de deslizamiento mensual del precio del diésel de 2012, equivalente a doce deslizamientos de 9 centavos por litro, se incrementaría en 1.08 pesos por litro al año, a este ritmo de deslizamiento, para diciembre 2013 los consumidores mexicanos pagarían el litro en 12.25 pesos.
En síntesis, la DGSDIA afirmó que al cierre del 2013, el precio de la gasolina Premium será de 12.15 pesos por litro; la Magna se ubicará en 11.89 y el diésel en 12.25.
Resaló que el encarecimiento de los precios de los petrolíferos en el país, incide directamente en el poder de compra de los salarios de los trabajadores.
“Los incrementos salariales únicamente cubren una parte del aumento de los precios de las gasolinas y el diésel, como consecuencia, el alza de los precios de los otros bienes y servicios ya no pueden ser cubiertos por el incremento salarial, porque todo se destina a cubrir el encarecimiento de estos petrolíferos, lo que se traduce en una pérdida acumulada de su poder de compra”, abundó.