El Senado de República pidió al Ejecutivo Federal para que, por conducto de la Secretaría de Salud, se destinen mayores recursos al Instituto Nacional de Cancerología, para continuar con el programa de acceso para la prevención, atención y tratamiento completo a las mujeres con cáncer de ovario, de conformidad con el presupuesto autorizado.
A los gobiernos estatales y a congresos locales, los exhortó a que dentro de sus presupuestos se destinen recursos para la ejecución de políticas públicas destinadas a la prevención y atención de este tipo de cáncer.
La senadora del Partido Verde Ecologista, María Elena Barrera Tapia destacó que con la aprobación del dictamen se garantiza el derecho a la salud de las mujeres.
El cáncer de ovario se encuentra entre los siete cánceres más frecuentes a nivel mundial y son la tercera causa de mortalidad entre los cánceres de origen ginecológico.
Además, dijo, no es posible detectarlo en pruebas como el papanicolau, por lo que las mujeres que se encuentran en grupos de alto riesgo, deben someterse a otro tipo de exámenes ginecológicos, ya que sus síntomas pueden confundirse con enfermedades comunes para la mujer, como colitis, cistitis, enfermedades pélvicas inflamatorias, parasitosis o dispersia entre otras, por lo que ocho de cada diez mujeres es detectada en etapas avanzadas.
En México, dijo, el Instituto Nacional de Cancerología ha reportado tres mil 900 nuevos casos por año, con lo que se coloca en el tercer lugar de los cánceres ginecológicos después del cáncer de mama y del cáncer cervicouterino.