*Realidad social en México

Ángel Sierra Ramírez, coordinador del Fondo Nacional de Apoyo para las Empresas de Solidaridad (FONAES), ofreció a los diputados federales un panorama de rotundo fracaso en los programas de desarrollo social que empuja el Gobierno para el campo mexicano.

En reunión de trabajo con los legisladores, dijo que es muy importante que se respete el esquema de banca social, ya que no hay aun actividad económica en el país –industrial, maquiladora, turística, de autoservicio y autocomercio-, que en el corto tiempo pueda generar tantas ocupaciones como la del sector social.

Afirmó que en este sector el 90 por ciento de los campesinos tiene más de 60 años, “lo que demuestra que no nos quedan muchas alternativas, pues los jóvenes han abandonado el campo; necesitamos articular y focalizar todos los programas y subsidios para mejorar las condiciones de crédito para el sector”.

Por su parte, Luis Roberto Llanos Miranda, director general Adjunto de Promoción de Negocios de los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA), dijo a los diputados que la estructura del sistema financiero es compleja y que el reto del financiamiento es mejorar la oferta a través de medios bancarios y no crediticios, pero de forma sostenible y de visión a largo plazo.

En su oportunidad, Isabel Cruz Hernández, directora general de la Asociación Mexicana de Uniones de Crédito del Sector Social (AMUCSS), refirió que se requiere de una garantía en el sistema de banca de desarrollo, pues el 80 por ciento de los pequeños agricultores del país son pobres y, por no ende, carecen de una garantía material.

Precisó que no se puede hacer sólo una reforma de FIRA o de Financiera Rural, sino es necesario un conjunto de herramientas que permita que se desarrolle el marcado, y las modificaciones a la banca de desarrollo no deben considerar nada más el enfoque agrícola ya que genera desigualdades.