El campo mexicano, y en especial la investigación agroalimentaria, no son prioridad para el gobierno federal, acusó el senador Antonio Mejía Haro, al afirmar que solamente se pretende implementar un modelo neoliberal de asistencialismo que ha demostrado ineficacia y fracaso para propiciar desarrollo en el sector.
Durante la reunión de trabajo organizada por la Comisión de Desarrollo Rural del Senado de la República, con diversas instancias encargadas de la investigación e institutos de educación, denominada: “La política de investigación para el campo”, el legislador por Zacatecas señaló que desde los años 80’s se han aplicado políticas agroalimentarias neoliberales que han fracasado, muestra de ello, es la actual dependencia alimentaria a los productos internacionales.
“No ha sido, ni es una prioridad del gobierno federal el campo mexicano, ya que en lugar de prepararnos para la competencia se hizo todo lo contrario, se desmanteló al campo de su infraestructura, activos y servicios, por lo que se firmó un acuerdo inequitativo (TLCAN)”, subrayó.
El también secretario de la Comisión de Desarrollo Rural comentó que los resultados de este convenio con Estados Unidos y Canadá han sido “desastrosos” para los productores mexicanos y a pesar de ello, aún se pretende firmar nuevos tratados con países como Perú.
Comentó que de signarse este acuerdo “sería un golpe mortal” para el campo mexicano, para los productores de chile seco, ajos, cítricos, plátanos, etcétera, “por lo que esperamos que el Senado no haga lo mismo que con el de Colombia que se dijo que no se aprobaría y al final se avaló”, manifestó.
Ante Pedro Brajcich Gallegos, director general del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), Carlos Alberto Villaseñor Perea, rector de la Universidad de Chapingo; Alfredo Sánchez López, investigador de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, entre otros, el senador del PRD dijo que esas políticas equivocadas agropecuarias han conducido al país a una dependencia alta de alimentos que en la actualidad es del 40 por ciento, “pero en 30 años según la ONU será el 80 por ciento”.
Durante su participación comentó que los catedráticos, productores nacionales e investigadores no deben estar escatimando más recursos para la preferencia tecnológica y sus actividades “ya que sería una miopía no ver que con estos apoyos vamos a tener más ventajas competitivas como país”.
Finalmente, Mejía Haro consideró que el Senado de la República debe arropar los objetivos del campo mexicano y que éstos “puedan reflejarse en leyes aprobadas en beneficio de los productores, así como de las mexicanas y mexicanos”.