Guillermo Pimentel Balderas
El Procurador Agrario nacional, Cruz López Aguilar, afirmó que la estabilidad a principios del Siglo pasado creó el México que queremos rescatar con el liderazgo del Presidente Enrique Peña Nieto.
En el marco de la Ceremonia de develación de los bustos del General Lucio Blanco Fuentes y de Marte R. Gómez, como parte de los festejos del Centenario del Primer Reparto Agrario en México, que se llevo a cabo en Saltillo, Coahuila, el Titular de la Procuraduría Agraria (PA), resaltó que Lucio Blanco, con su acción, con sus arrestos y con su valentía, entregó tierras a los que no tenían nada, a los que eran excluidos, y les dio estabilidad.
Destacó que de ahí, vinieron, lógicamente, los trabajos que se hicieron en México, para crear la infraestructura hidroagrícola, y que la suma de esto, la estabilidad económica, financiera, a principios del Siglo pasado “creó realmente el México que nosotros queremos rescatar y que estamos haciendo todos, con el liderazgo del Presidente Enrique Peña Nieto”, apuntó.
Ante la presencia de la Subsecretaria de Desarrollo Agrario de la SEDATU,Georgina Trujillo Zentella; del Rector de la Universidad Autónoma Agraria “Antonio Narro”, Heladio Heriberto Cornejo Rubio; de Arnoldo Martínez Cano, subsecretario de Fomento Agropecuario del estado de Coahuila y representante personal del gobernador, Rubén Moreira; de Ramón Valdivia Alcalá, Director General Académico de la Universidad Autónoma de Chapingo, con la representación del Rector Carlos Alberto Villaseñor Perea; Rubén Treviño Castillo, Subprocurador nacional de la PA; Mario Eulalio Gutiérrez Talamás, delegado federal de la SAGARPA en Coahuila, con la representación del secretario Enrique Martínez y Martínez; Luis Humberto Ruiz Cabello, delegado federal de la Procuraduría Agraria en Coahuila, López Aguilar señaló que en el primer reparto agrario del norte del país, se entregaron 12 títulos de propiedad.
Resaltó que Lucio Blanco fue quien creó las condiciones para la dotación de tierras a los ejidatarios, y que ello permitió que se le diera cause a todo el proceso de los ejidos en el país, que significa del orden de más del 80 por ciento de la tierra de propiedad social.
También, afirmó que el prócer revolucionario representa para el campo mexicano un personaje de gran trascendencia, partiendo de su contacto con la tierra, y su trayectoria militar, pues tuvo la certeza de aprovechar los momentos coyunturales para promover los cambios que el país requería en un periodo turbulento que emergía de un proceso revolucionario que aún no tenía fin.
“En Matamoros, Tamaulipas –en mi tierra-, el 30 de agosto de 1913, Lucio Blanco Fuentes, procedió al fraccionamiento de la hacienda “Los Borregos”, propiedad de Félix Díaz, sobrino de Porfirio Díaz. Ese fue el primer reparto agrario del norte del país, ahí se entregaron 12 títulos de propiedad en los que se señalaba que la propiedad de las tierras implicaba la obligación –fíjense que interesante-, la obligación de cultivarlas, que el derecho le otorgaba que no podía ser allanado, enajenado o embargado.
También, agregó, se estipulaba, que la falta de cultivos implicaba la pérdida de los derechos de la propiedad y, cuyo caso, los terrenos volvían al dominio de la nación”, expuso.
El Procurador Agrario nacional, precisó que ese primer reparto de tierras culminó con la resolución presidencial de 1938, publicado en el Diario Oficial de la Federación el año siguiente.
“Todos nos preguntamos ¿quien fue Lucio Blanco Fuentes?, en mi opinión, es uno de los próceres agrarios más importantes del país, y que por algunas circunstancias, a la mejor histórica, a lo mejor por las condiciones en que se vio el triunfo de la Revolución Mexicana, no se le ha hecho justicia”, indicó.
Luego, el Titular de la PA comentó que si se hace una comparación con los dos próceres más importantes en materia agraria, Emiliano Zapata Salazar y Lucio Blanco Fuentes, podríamos pensar perfectamente claro que el Caudillo del Sur se encargo de darles justicia a las comunidades agrarias; pues él trabajo para consolidar, después, en el proceso agrario, la tenencia de la tierra de las comunidades, la restitución de las tierras de esas comunidades y, el Caballero de la Revolución, fue quien creó las condiciones para la dotación de tierras a los ejidos, a los ejidatarios.
López Aguilar recordó que Lucio Blanco destaco por haber sido de los primeros en seguir a Venustiano Carranza -coahuilense también-, al frente del regimiento “Libres del Norte”, cuando éste ingreso su capacidad militar contra Victoriano Huerta.
Agregó que sobre las muchas virtudes de Lucio Blanco Fuentes sobresale la fidelidad a su origen rural y a la causa campesina que lo enfrentó con Venustiano Carranza, Álvaro Obregón y Francisco Villa.
“Los enemigos de Lucio Blanco Fuentes no fueron menores, eran verdaderamente quienes participaron con gran prevalencia en la Revolución Mexicana. Y, en contrapartida, a mantener una alianza indestructible con mi General Emiliano Zapata Salazar, que fue un verdadero aliado a la lucha que dio el Caudillo del Sur”, subrayó.
Asistieron también a esta ceremonia, como invitados especiales: Nuria Urquiza Fernández, representante de la FAO en México; Esther Gómez Leal, hija de Marte R. Gómez; el sobrino del General Lucio Blanco, Víctor Blanco Izcabalceta, Aureliano Piña Lomelí, ex rector de la UAChapingo, Oscar Pimentel, y el Coronel de Infantería Ricardo García, con la representación de la VI Zona Militar, entre otros.