Intentan legislar
La diputada María Eugenia Ocampo Bedolla presentó una iniciativa de reforma a la Ley de Hidrocarburos con la que busca que las empresas que hayan sido responsables por daño en materia ambiental y/o patrimonial, no puedan participar en licitaciones de proyectos de extracción.
Al presentar su propuesta, la legisladora subrayó la importancia de incorporar en la Ley instrumentos jurídicos que establezcan un sistema de prevención y responsabilidad, que permita reducir las posibilidades de que ocurra contaminación por derrame de hidrocarburos.
En tribuna explicó que a partir de la reforma energética, en México contamos con un nuevo régimen que permite la participación privada en la extracción de hidrocarburos.
Sin embargo, dijo, es nuestra obligación como representantes populares, velar porque las empresas que participen en este sector, no cuenten con un mal historial de daño ambiental a nivel nacional o internacional.
Ocampo Bedolla subrayó que si bien la legislación en materia de protección ambiental, prevé sanciones a aquellos responsables de los desastres naturales que dañan nuestra biodiversidad, es necesario ir más allá y legislar para prevenir.
“Para ello, proponemos que mediante la legislación se establezca como requisito ineludible, que las empresas que deseen participar en las licitaciones de proyectos de extracción de hidrocarburos, no hayan tenido antecedentes de accidentes, por negligencia o falta de capacidad atribuida a las mismas”, insistió.
La también secretaria de la Mesa Directiva señaló que la explotación y transporte de petróleo, son las principales fuentes de contaminación, sobre todo en ríos, mares y océanos, pues aproximadamente el 60 por ciento de la producción mundial se transporta por vía marítima.
Además, se estima que 3 mil 800 millones de litros de hidrocarburos entran cada año a los océanos como resultado de las actividades humanas.
Entre los más graves desastres ambientales, agregó, se encuentran los derrames de petróleo, que provocan grandes daños a los ecosistemas y a la salud humana, con las consecuentes afectaciones socioeconómicas.
Por lo anterior, agregó, proteger el patrimonio, la salud y el derecho humano de todos los mexicanos a un medio ambiente sano, es una responsabilidad que asumimos y estamos dispuestos a crear las condiciones para ello.
“Estamos decididos a impulsar las iniciativas que propicien cambios sustantivos para una explotación racional y responsable de nuestros recursos”, concluyó la diputada.