La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó a la Cámara de Diputados que en 2012 los consulados mexicanos en la frontera con Estados Unidos registraron 13 mil 454 casos de menores no acompañados, detenidos por autoridades migratorias estadounidenses.
Detalló que la SRE, a través de sus representaciones en Estados Unidos, brinda protección consular a estos menores que son devueltos por los servicios de migración del vecino país.
Su propósito es vigilar el respeto de sus derechos y asegurarse de que no hayan sufrido maltrato, violencia o discriminación, ni separados o alejados de sus familiares -en los casos en que vayan acompañados- así como que su repatriación ocurra en el marco de los acuerdos establecidos entre ambos países, afirmó.
El 7 de febrero y 30 de abril, la Cámara de Diputados emitió puntos de acuerdo donde solicitó a la SRE informes respecto a programas y acciones implementados para la repatriación segura, ordenada, digna y humana de niños, niñas y adolescentes deportados por el gobierno de los Estados Unidos.
A través de los dictámenes con puntos de acuerdos, los legisladores expresaron que los niños y niñas migran por razones de pobreza extrema, búsqueda de oportunidades educativas y laborales, bajos ingresos, familias desintegradas, violencia intrafamiliar e incluso por la delincuencia organizada.
Destacaron que la migración infantil se ha incrementado, sin que se apliquen medidas adecuadas que observen ante todo el interés superior de la infancia, pues durante el recorrido para llegar a su destino enfrentan engaños, maltratos, violaciones, son explotados e, inclusive, se reportan casos de reclutamiento por la delincuencia organizada.
Refirieron que en 2010 se conocieron 15 mil 540 historias de niñas y niños mexicanos que intentaron cruzar a Estados Unidos sin lograrlo. En 2011, el gobierno estadounidense entregó a México 14 mil 237 menores migrantes no acompañados, de los cuales once mil 520 eran mexicanos y dos mil 717, de otras nacionalidades.
En el documento publicado en la Gaceta Parlamentaria, la SRE subrayó que para el gobierno de México es una prioridad proteger los derechos de los migrantes en situación de vulnerabilidad, en particular los de menores.
Por ello, detalló que los esfuerzos desplegados se han concentrado en cuatro frentes: estableció un marco bilateral uniforme para la repatriación segura y ordenada de menores no acompañados, privilegiando el respeto a la unidad familiar.
Fijó procedimientos específicos en cada punto fronterizo para la repatriación de menores de edad, estableciendo que se hará únicamente en horarios diurnos y lugares predeterminados, lo que permite a las autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) y DIF municipal canalizar y atender al menor en territorio nacional.
De igual modo, agregó, se fortaleció la relación institucional y la cooperación entre la Red Consular Mexicana en Estados Unidos y los albergues para menores que administra la División de Atención a Menores no Acompañados (DUCS) de la Oficina de Reubicación de Refugiados (ORR) del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de EU.
Como consecuencia de la entrada en vigor en 2008 de la Ley de Protección a Víctimas de Trata -Trafficking Victims Protection Reauthorization Act-, durante los últimos años se ha registrado un incremento en el número de menores de edad mexicanos que son colocados bajo custodia de DUCS, agregó.
También, resaltó, se multiplicaron los mecanismos formales de comunicación con departamentos estatales de servicios y protección a los menores, y se intensificaron las acciones legales en defensa y apoyo de este grupo social.
La capacidad de asistencia técnico-jurídica de la red consular de México en Estados Unidos, añadió, se ha reforzado mediante diversos esquemas, buscando identificar casos judiciales de “alto impacto que puedan crear precedentes de carácter general favorables a los derechos y condiciones de vida de los mexicanos en Estados Unidos”.
Por ello, enfatizó la SRE, la atención a menores de edad mexicanos en situaciones de vulnerabilidad seguirá siendo un área prioritaria, y continuará trabajando con autoridades mexicanas y estadounidenses para defender los derechos e intereses de los niños y niñas que son repatriados.