Javier Corral Jurado hizo uso de la tribuna del Senado de la República para externar su inconformidad por la premura con la que se llevó a cabo el proceso de dictaminación y votación para ratificar a los aspirantes a comisionados del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFETEL).
El chihuahuense lamentó que los integrantes de las Comisiones de Radio, Televisión y Cinematografía; Comunicaciones y Transportes, y Estudios Legislativos no se reunieran para discutir los perfiles de los aspirantes, antes de poner este dictamen a consideración del pleno.
Lo anterior en virtud de que el dictamen, dijo, “tenía que responder frente a información de intereses relacionados y, si es cierto o no que los tenían y quién debía ser, incluso, el presidente de este órgano. Yo sé que ya hay un acuerdo; yo sé que ya está acordado y negociado el presidente del órgano; como el aval a todos los comisionados, los candidatos, he ahí el diferendo fundamental”.
Ante ello, insistió en que “teníamos que asegurarnos de la independencia frente a los regulados y la autonomía frente al Poder Ejecutivo. Ese era un valor fundamental porque hemos presumido a un órgano constitucional autónomo. Por primera vez le quitamos al Presidente de la República la facultad de otorgar concesiones en radio y televisión, se la dimos a un órgano constitucional autónomo y por lo tanto teníamos que asegurarnos de esa independencia y de esa autonomía”, pues son estos los valores de idoneidad a que se refiere el artículo 28 de la Constitución.
El legislador chihuahuense aseguró que “a mí no me decantan en materia de los comisionados del IFETEL, fobias o filias personales. Yo una causa muy importante desde hace muchos años. Yo creo en la reforma constitucional en materia de telecomunicaciones y creo que nosotros estábamos obligados a integrar un órgano a prueba de balas. Un órgano a la medida de los intereses que va a regular. No sólo se trataba de capacidad técnica, de expertise o conocimientos en un examen, no, se trata también de la idoneidad”.
“Nunca debemos renunciar a la capacidad de deliberación y de discusión entre nosotros. No somos grupo cerrado que oye, calla y obedece. Eso no puede ser jamás el Senado de la República. Este es un órgano deliberante y lo podemos hacer con respeto, no se necesita el insulto y la diatriba. Yo soy un enemigo de la diatriba, de la descalificación personal, por eso aclaro: mi posición es distinta a las motivaciones que aquí se acaban de decir en la tribuna. Yo tengo una posición sobre este dictamen distinta a los motivos que otros legisladores han planteado”.
Por último, Corral lamentó la falta de voluntad para cambiar la decisión de presentar hoy ante el pleno este dictamen, el cual tenía que responder frente a la información de que algunos aspirantes estaban impedidos de ocupar un lugar en el Instituto, debido a intereses relacionados con las empresas que deben regular, como es el caso de Mario Germán Fromow Rangel y María Elena Estavillo Flores, vinculados laboralmente con Telmex y Telefónica, respectivamente.