A fin de combatir el tráfico ilegal de tabaco es urgente que las autoridades federales refuercen las acciones y operativos de seguridad, principalmente en fronteras y aduanas al sur del país, ya que es de donde generalmente provienen, afirmó el diputado federal, Rubén Félix Hays.
A lo anterior, agregó que en México, de cada 100 cigarros que se consumen, 17 son provenientes del contrabando y la piratería, lo que representa no solamente pérdidas económicas para los productores y la industria tabacalera, sino un grave peligro para la salud de los consumidores.
Asimismo, el legislador por Nueva Alianza advirtió que es necesario que las autoridades sanitarias alerten a la población, a través de campañas de información, sobre el consumo de cigarros apócrifos, así como de marcas de dudosa procedencia o que se ofrecen en el comercio informal por debajo de los costos establecidos.
“Es preciso que los más de 17 millones de fumadores que tenemos en México y la ciudadanía en general, estén informados sobre este tipo de cigarros que son doblemente perjudiciales para la salud, pues no cuentan con la normatividad en la materia”, apuntó.
El también integrante de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados subrayó que “si ya de por sí fumar es perjudicial para la salud, consumir este tipo de cigarros representa un mayor riesgo y a futuro derivaría en un grave problema de salud pública, ya que, según las propias autoridades, en su composición se han detectado materiales como el aserrín, pasto y partículas de heces fecales”.
Además, refirió que de acuerdo con la última Encuesta Nacional de Adicciones, existen 17.3 millones de fumadores activos en el país, y el consumo promedio de cigarros por día es de 6.5. De éstos, el 16.6 por ciento pertenece al mercado del contrabando, según un informe de la Confederación de Cámaras de Industriales (Concamin).
Estas cifras, dijo, permiten calcular la cantidad de cigarros ilegales que se consumen a diario, situación que obliga a tomar las medidas pertinentes para evitar el contrabando de este producto y alertar a los consumidores sobre el peligro que representa, y así evitar consecuencias irreparables para la salud de los mexicanos y las finanzas del país.
Félix Hays precisó que al año ingresan a México 340 millones de cajetillas que no pagan impuestos y que carecen de control sanitario, provocando una pérdida recaudatoria de casi seis mil millones de pesos, de acuerdo con la compañía British American Tobacco.
Finalmente, el diputado por Sinaloa indicó que hasta mayo de este año, tan sólo en el Distrito Federal se decomisaron casi un millón de cigarros ilegales que ingresaron al país por la frontera con Belice, provenientes principalmente de países como Paraguay, Vietnam, India, Estados Unidos y Canadá.