Mientras que la CNC aplaude todo al presidente Enrique Peña Nieto y a la SAGARPA, el frente legislativo integrado por los diputados Sebastián de la Rosa, Rosendo Serrano, Antonio León Mendívil, Pedro Porras, Rodrigo Barrios y Guadalupe Moctezuma y, el senador Fidel Demédicis, todos ellos integrantes de la Coalición de Organizaciones Democráticas, Urbanas y Campesinas (CODUC), se inconformaron con la propuesta de Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación enviado por el Jefe del Ejecutivo, porque “en términos reales es inferior en casi 6 mil millones de pesos”.

Ante tal situación, los legisladores reclamaron que el PEC se ubique en 337 mil millones de pesos, dado la situación de crisis del medio rural.

El punto central en la definición del PEC 2013, dijo el senador Fidel Demedicis Hidalgo, debe estar en su reorientación, pues se requiere que aunque el monto fuera el propuesto este estuviera mejor distribuido, orientándose al fomento productivo, ya que se sabe por estudios que sólo el 1.1% de los recursos en fomento productivo van a los estratos campesinos, familias rurales o pequeños productores.

En un documento firmado entre el frente legislativo y organizaciones campesinas como CODUC, CIOAC, UNORCA y UGOCM, precisan que para que el proyecto de PEC 2013 no se contraponga en los montos al Pacto por México, debe darse una reorientación en los programas hacia los pequeños productores, porque cabría la pregunta ¿dónde quedó el componente del Pacto cuando se refiere a los derechos de los pueblos indígenas?

De acuerdo al posicionamiento de los legisladores del sector campesino, el presupuesto rural productivo no ha superado los valores reales desde el nacimiento del modelo neoliberal; es decir, es menor durante los últimos 30 años, comparándolo con el modelo previo, por lo que se requiere una visión amplia, profunda, que resuelva los grandes problemas del campo.

Advierten que la única forma de producir alimentos en el país es con la participación de las familias rurales y que estos sean considerados como pequeños productores y no como pobres.

Señalan que lo anterior es parte medular de la propuesta de un modelo alternativo para el campo mexicano y es imprescindible su reflexión, colectiva y de políticas públicas se tomen en estos días en México, incluyendo el Pacto por México y el PEC 2013.