El recién descubrimiento de que cárteles mexicanos roban maquinaria y equipo petrolero para extraer crudo ilícitamente de los oleoductos de Petróleos Mexicanos y la detención de un buque que transportaba en costas de Tabasco más de 390 mil litros de diesel presuntamente robado, nos obliga a realizar cambios urgentes en la política comercial y de seguridad en la paraestatal, para evitar que la delincuencia continúe aprovechándose de las tomas clandestinas, indicó el senador Arturo Escobar y Vega.
Dijo que hasta el momento, la Estrategia Integral de Abatimiento del Mercado Ilícito, implementada por la petrolera, con el propósito de reducir el robo de hidrocarburos en la Red Nacional de Ductos, debe revisarse y adecuarse a las actuales circunstancias, debido a que cada día el crimen organizado utiliza nuevas tecnologías para el robo de combustibles.
En entrevista, mencionó que en lo que va del año se han detectado 763 tomas clandestinas en los sistemas de ductos de Pemex, siendo el estado de Veracruz el más afectado por el ilícito y detalló que al cierre de mayo el volumen de combustible sustraído ilícitamente por las tomas clandestinas ascendió a 1 millón 481 mil 302 barriles, “lo que deja ganancias multimillonarias al crimen organizado”.
En este sentido, el legislador hizo un llamado a las autoridades de las Secretarías de Marina y Defensa Nacional, así como a la Procuraduría General de la República y Policía Federal, a incrementar la vigilancia en la Red Nacional de Ductos, “porque los sistemas están tomados prácticamente por grupos delincuenciales fuertemente armados”.
De igual forma, el senador del Partido Verde convocó a las autoridades de Pemex a incrementar la supervisión técnica y operativa para detectar los puntos vulnerables en los poliductos y oleoductos donde podrían colocarse tomas clandestinas.
Para el líder del Partido Verde, resulta preocupante el creciente fenómeno del robo de combustibles a la industria petrolera nacional, pues además de alimentar el grave fenómeno delictivo que se vive en nuestro país, se diezma el patrimonio de Petróleos Mexicanos.
“Ante el incremento en el robo y transporte ilícitos de combustibles, lo que representa una pérdida anual de 20 mil millones de pesos, es importante que el Estado atienda de manera urgente este tema, al ser los hidrocarburos una fuente importante de generación de energía para la industria, nuestros hogares y para el desarrollo de nuestro país”, puntualizó.