El coordinador del Grupo Parlamentario del PRI (GPPRI), Emilio Gamboa Patrón, inauguró junto con el embajador de China en México, Xiaoqi Qiu, la Semana Cultural “China: tradición y desarrollo en armonía”, en el marco del 42 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
En la ceremonia, realizada en la explanada de la Cámara de Senadores, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores Asia Pacífico, Teófilo Torres Corzo, exhortó a los presentes a trabajar para hacer más fuertes a estas dos naciones, ya que unidos se puede lograr la mancuerna que consiga concretar “nuestros ideales”.
Hagamos de nuestra relación bilateral un ejemplo frente a todas las naciones del mundo, aseveró el también legislador por el estado de San Luis Potosí.
Recordó que estos 42 años han sido de aprendizaje mutuo, de diálogo, de cooperación bilateral en un marco jurídico fuerte y con una gran amplitud de miras.
Además, han permitido estrechar los vínculos de amistad, los cuales tienen como antecedente inmediato, el compromiso de fortalecer, el diálogo político, cultural y económico entre los Gobiernos de México y China.
Sobre el particular, Torres Corzo dijo a las senadoras y senadores Lucero Saldaña Pérez, Graciela Ortiz González, Itzel Ríos de la Mora, Marcela Guerra Castillo, Claudia Pavlovich Arellano, Humberto Mayans Canabal, Enrique Burgos García, José Ascención Orihuela Bárcenas, así como a su coordinador de bancada, Emilio Gamboa, que este evento cultural tiene el objetivo de acercar más a la población china y mexicana, al conocimiento mutuo y con la expectativa de que cada día se sumen más actores, a fin de hacer de esta relación diplomática “una estrella brillante y próspera en el firmamento de nuestra historia común”.
Por su parte, el embajador de China, Xiaoqi Qiu, destacó que el nuevo gobierno de su país busca no solamente lograr un desarrollo rápido y sostenido, sino también un desarrollo amigable con el medio ambiente.
Asimismo, comentó que siempre sienten la cercanía y el cariño de México, y prueba de ello, es que los puntos comunes superan las diferencias, no sólo en el terreno cultural, sino también para las relaciones binacionales.
“China y México coincidimos en seguir el camino del desarrollo pacífico, el de la apertura al exterior y el mismo deseo de consolidar y fortalecer las relaciones bilaterales”, agregó.