El senador panista José Rosas Aispuro Torres propuso introducir en la Constitución el mecanismo de revocación del mandato para los cargos de gobernador, presidentes municipales, síndicos y regidores.
Destacó que el objetivo es brindarle a la ciudadanía mayores incentivos para el control sobre la clase política y promover entre los votantes la demanda de una real y auténtica rendición de cuentas.
En el primer caso, expuso que la sola inclusión de la figura de la revocación del mandato estimulará a los representantes populares a cumplir de manera más apropiada con sus atribuciones y responsabilidades, y los obligará a considerar que el “no cumplimiento” puede inducir a los ciudadanos a solicitar su revocación.
El legislador por Durango señaló que el mecanismo de la revocación podría traducirse en que los resultados de los representantes populares “estén aún más a la vista de los electores”, toda vez que estarían buscando la oportunidad de probar que efectivamente está cumpliendo con lo prometido en campaña.
De lo anterior, dijo, se desprende la factibilidad de modificar el artículo 35 de la Carta Magna para introducir el mecanismo de revocación de mandato, en respuesta a las exigencias ciudadanas pero también a las múltiples recomendaciones del gremio político nacional e internacional.
Mencionó que existen múltiples experiencias exitosas que ya han tenido varios países del mundo, incluyendo algunos latinoamericanos como Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela que demuestran que sí es factible aplicar una herramienta de esta naturaleza, considerando los elementos y los candados necesarios para que funciones eficientemente.
Rosas Aispuro reiteró que su propuesta está dirigida a gobernadores, presidentes municipales, síndicos y regidores, debido a los cada vez más frecuentes procesos y escándalos en que se ven involucrados este tipo de funcionarios.
Además, dijo, por cuestiones que tienen que ver con incautación de cantidades exorbitantes en domicilios de colaboradores directos, de la compra de productos y prendas para vestir excesivamente costosas, con desvío de recursos, nepotismo, con la auto fijación de sueldos estratosféricos, con nexos con el narcotráfico, entre otros motivos.
Dejó en claro que su iniciativa es consecuente con el desencanto y desesperanza de los electores que están apreciando cada vez de manera más directa la necesidad de “retirarle el voto de confianza” depositado en los candidatos que obtuvieron el triunfo electoral pero no respondieron a los valores de honestidad, legalidad y lealtad, y no cumplieron las promesas de campaña.