Al dar inicio al análisis del Primer Informe de Gobierno, los distintos grupos parlamentarios en la Cámara de Diputados hicieron severas observaciones a los actuales programas sociales. La legisladora de Nueva Alianza, Cristina Olvera Barrios, secretaría de la Comisión de Desarrollo Social, indicó que hay 7 millones de mexicanos en pobreza extrema y que carecen de acceso a la alimentación, lo cual, subrayó, “es claro síntoma de que el modelo implementado ha sido un fracaso”.

“El aumento de población en situación de pobreza entre el 2010 y 2012 ubica en esa condición a 53 millones de mexicanos, además que otros 43 millones están en peligro de pobreza a causa de bajos ingresos y carecer de acceso a servicios de educación, salud, alimentación o seguridad social” agregó.

Por lo anterior, dijo, es insuficiente que existan programas si no se traducen en una mejor política pública. “Existen avances, pero se requiere de un desarrollo integral que supere las visiones asistenciales. La Cruzada Nacional contra el Hambre ha generado más dudas y enconos que expectativas reales para acabar con la desnutrición de millones de mexicanos”, opinó.

Por el PT, el diputado José Arturo López Candido, también secretario de la Comisión de Desarrollo Social, dijo que resolver la pobreza “va más allá de una cruzada”, pues depende de  factores como el desarrollo económico.

“El problema es estructural no de paliativos o de dádivas, tiene que ver con mejoras salariales y elevar el nivel de vida de los trabajadores, así como sus prestaciones sociales. Hoy el modelo usado se ha equivocado, es fundamental cambiarlo, se debe impulsar el capital productivo en lugar del especulativo, debe impulsarse la generación de empleos”, agregó.

Respecto a la calidad educativa, el legislador consideró que los bajos niveles que ha obtenido México en Español y Matemáticas no sólo son responsabilidad del docente, sino del modelo impulsado por el Estado. “Debe contarse con material pedagógico, e instalaciones adecuadas para no tomar clases debajo de un árbol”, dijo. 

En su intervención, la diputada Nelly del Carmen Vargas Pérez (Movimiento Ciudadano), mencionó que el gobierno ha sido omiso en garantizar el derecho de acceso a la salud, lo cual tiene en profundo abandono a los organismos públicos como, el Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), lo que repercute en el desabasto de medicamentos y el servicio limitado de acceso a la población.

Sostuvo que las indebidas políticas sociales de gobiernos anteriores han permitido que el 60 por ciento de los trabajadores del país laboren en la informalidad lo cual ha provocado el ahorcamiento financiero de estos institutos. Dijo que México es el país integrante de la OCDE que menos gasta en salud, dedicándole alrededor del 6 por ciento del presupuesto.

“Más de 50 millones de mexicanos se encuentran sin ninguna cobertura de servicio de salud y 4 millones no cuentan con un centro de salud en su comunidad”, añadió la legisladora.

En su turno,  el diputado Mario Francisco Guillén Guillén, del Grupo Parlamentario del PVEM, dijo que es compromiso del Ejecutivo Federal mantener y presentar programas sociales que se vinculen con la productividad y crecimiento económico, a fin de construir un país más incluyente.

Explicó que otro de los retos es fomentar el acceso a una alimentación suficiente, a la educación, a programas sociales en materia de salud, así como el diseño de un amplio catálogo de apoyos dirigidos a  la sociedad más vulnerable.

En este sentido, afirmó que la presente administración se ha preocupado por impulsar un sistema nacional de salud universal, cuya finalidad sea fortalecer la coordinación entre la Secretaría de Salud y las demás secretarías de este ramo, en una primera etapa se ha privilegiado la ampliación de la infraestructura física y la formación de recursos humanos con base en una exhaustiva evaluación interinstitucional.

En la postura del PRD, el diputado Uriel Flores Aguayo criticó los alcances del programa social Cruzada Nacional contra el Hambre (CNCH), porque, consideró, “muestra más un interés de manejo propagandístico, que una preocupación por dar respuesta a la carencia alimentaria”.

Sostuvo que la Cruzada atiende a 7.4 millones de mexicanos, pero “la situación de pobreza es mucho más amplia que el número de personas al que está dirigido el programa”. A saber, refirió, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) dio a conocer recientemente que 27.4 millones de personas padecen hambre, y 53.3 millones, pobreza.  

“Si bien el informe presentado por el Ejecutivo Federal en el ámbito que nos ocupa refiere cifras sobre la población atendida y los montos ejercidos, a la fecha de corte no hay propuestas concretas para resolver la problemática objeto de la Cruzada, lo cual debería ser información fundamental para conocer su eficacia”, añadió.

La diputada panista, María Beatriz Zavala Peniche, dijo que su fracción parlamentaria ha dado al gobierno condiciones para trabajar de la mejor manera para México; sin embargo, “no hay resultados”. A nueve meses de esta administración, “la política social del país enfrenta sus peores momentos”, sostuvo.

Señaló que esta requiere acciones decisivas, por ejemplo, en garantizar el acceso de la población a la salud y a las instituciones de seguridad social, así como en el tema de igualdad, del cual “a casi un año del gobierno, no hay estrategia para combatir las diferencias entre hombres y mujeres”.

La diputada por el estado de Yucatán apuntó que su partido “está convencido de que para garantizar los derechos universales en salud, educación, alimentación y empleo, es necesario forjar un nuevo compromiso pluripartidista, amplio y abierto a la sociedad, para realizar los cambios que el país requiere en materia de protección social”.

En su intervención, el diputado Gerardo Xavier Hernández Tapia (PRI), expresó que de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en el 2012 45.5 por ciento de los mexicanos vivía en condiciones de pobreza multidimensional, es decir,  53.3 millones de personas no disponían de ingresos suficientes para adquirir los bienes y servicios necesarios.

El también secretario de la Comisión de Desarrollo Social, señaló que el 9.8 por ciento de la población, equivalente a 11.5 millones de personas, vivía en una situación de pobreza extrema, mientras que 7 millones de mexicanos aún padecen la doble condición de pobreza y carencia de acceso a la alimentación. Por ello, “es indispensable dotar de salud, alimentación, agua, servicios básicos y una vivienda digna”, aseguró.

De conformidad al análisis del Primer Informe de Gobierno, en el tema de política social, el diputado por el Estado de México destacó una inversión de 123 mil millones de pesos en carreteras, caminos rurales y puentes, misma que llegará a 183 mil millones de pesos, lo cual, dijo, constituye un factor determinante para llevar calidad de vida y promover el desarrollo en diversas regiones del país.