Las Academias de Ciencias de 14 naciones entre las que se encuentra la Academia Mexicana de Ciencias, emitieron hoy una declaración sobre el papel de la ciencia, la tecnología y la innovación para el desarrollo sostenible, que será entregada a los gobiernos de sus respectivos países y a los líderes en las cumbres mundiales que habrán de realizarse este año.
Las Academias de Ciencias en todo el mundo, reúnen evidencias y proporcionan asesoramiento para ayudar a sus países en las decisiones sobre el desarrollo.
Durante los últimos ocho años, un grupo de academias (denominado G-Science) ha emitido recomendaciones dirigidas a los gobiernos reunidos en las cumbres sobre temas globales.
Este año, la Academia Nacional de Ciencias de India convocó a continuar con este proceso al considerar que satisfacer las necesidades humanas, tanto ahora como en el futuro, sigue siendo uno de los principales desafíos.
En su declaración, las Academias de Ciencias firmantes ofrecen puntos de vista sobre cómo la ciencia, la tecnología y la innovación pueden desempeñar un papel importante en el impulso de un desarrollo sostenible.
La declaración aborda el reto que representan los cambios demográficos. En las naciones en desarrollo se requiere de una inversión intensa con el fin de eliminar el analfabetismo y mejorar la educación en todos los niveles, señala el documento, el cual también se refiere a la necesidad de mejorar la alimentación y fomentar estilos de vida saludables.
El creciente número de personas de edad avanzada requiere de atención especial y de la innovación a fin de prestar atención sanitaria adecuada.
De acuerdo con la declaración, para 2050 la población urbana representará aproximadamente el 70% del total. Las tasas de urbanización no planificadas en las economías en desarrollo están ejerciendo una enorme presión sobre la vivienda y la gestión de los recursos como el agua, la energía y el suministro de servicios esenciales como la sanidad, el transporte, la salud y la eliminación de residuos.
Ante este reto son indispensables las inversiones en investigación y nuevos enfoques innovadores, así los como cambios de comportamiento.
Ante las proyecciones sobre la escasez de agua, es esencial desarrollar nuevas formas de aumentar la disponibilidad de agua limpia. Ante ello, debe estudiarse la mejora de los sistemas de gestión y soluciones tecnológicas para el tratamiento de agua, reciclaje y la desalinización del agua de mar entre otras acciones. Estos métodos requieren la atención y la acción de los gobiernos en todo el mundo, dice la declaración.
Para atender las necesidades de una población mundial del orden de los 9 mil millones, el nivel de producción de alimentos y la eliminación de la desnutrición y el hambre debe seguir el ritmo del aumento de la población y se deben considerar los efectos del cambio climático en la agricultura.
Se requieren además estrategias para equilibrar el uso de fertilizantes sintéticos y plaguicidas por equivalentes más naturales para garantizar resultados favorables al medio ambiente.
También debe darse atención simultánea a la preservación de la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas. La producción y el consumo de alimentos necesitan de la ciencia, la tecnología y la innovación y de nuevas perspectivas para promover la salud, reducir las pérdidas posteriores a la cosecha y reducir los residuos.
Sobre el tema de la energía, la declaración sostiene que la quema de combustibles fósiles es el motor principal del cambio climático y sus efectos nocivos como el aumento del nivel del mar, los fenómenos meteorológicos extremos y la acidificación de los océanos, por lo que se requiere de medidas para la conservación y eficiencia energéticas de bajo costo y de una amplia gama de opciones de energías limpias y renovables.
Para el desarrollo sustentable y equitativo, es necesaria la alfabetización universal, que incluya especialmente a las mujeres. La alfabetización, aclara el comunicado, debe ser mejor entendida para incluir la alfabetización científica, ya que muchos de los desafíos que enfrentamos requerirán soluciones de ciencia y tecnología.
En muchos países se han puesto en marcha programas creativos e innovadores para mejorar los enfoques de aprendizaje y para dotar a los profesores con la capacitación y los recursos necesarios. La educación científica basada en investigación es un enfoque prometedor en el que las Academias de todo el mundo están trabajando en apoyo de la mejora de la educación, se afirma en la declaración.
Los avances en la ciencia, la tecnología y la innovación son necesarios, aunque no suficientes, para resolver los muchos retos subyacentes del desarrollo sostenible. Estos incluyen la mala gobernanza en todos los niveles, desde el local, los sistemas de educación global inadecuados y la falta de desarrollo rural. No obstante, las Academias creen que la promoción de los valores de la ciencia, incluyendo el énfasis en la evidencia, la apertura, las normas éticas y de responsabilidad social puede contribuir a la buena gobernanza.
El documento está firmado por las Academias de Ciencias de África, Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, India, Italia, Japón, Malasia, México, Nepal, Reino Unido, Rusia y Sudáfrica.