Durante el primer semestre del 2012, el Gobierno Federal recaudó 16 mil 548 millones de pesos por Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a productos de tabaco; es decir, 15% más en términos reales respecto a la recaudación obtenida por el mismo concepto en el primer semestre del 2010, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El análisis de esta dependencia detalla que entre enero y diciembre de 2010 se recaudaron 26 mil 925 millones de pesos, en comparación con el mismo periodo del 2011, en el que se lograron 30 mil 343 millones de pesos.
En el marco de la presentación del “Informe del Primer Semestre del 2012 de recaudación por Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a productos de Tabaco”, el senador Ernesto Saro Boardman, presidente de la Comisión de Salud en el Senado de la República, señaló que “la recaudación por concepto del IEPS a tabacos labrados ha tenido un claro incremento durante los dos últimos años.
“Desde la implementación del impuesto de 7 pesos por cajetilla en enero de 2011, al primer semestre de 2012 se han recaudado 46 mil 891 millones de pesos”.
Añadió que de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) y de la Secretaría de Economía (SE), durante los primeros cinco meses del 2012, el consumo legal de cigarros en México bajó en 14 millones de cajetillas; es decir, un 3% en relación al mismo periodo de 2010.
Por otra parte, el consumo de cigarros en los primeros 5 meses de 2012 fue de 498 millones de cajetillas, mientras que en 2010 fue de 512 millones de cajetillas.
Sin embargo, es importante señalar que el consumo equivalente a los primeros cinco meses del 2011 está subestimado, debido a que la industria incrementó su producción nacional a finales de 2010, para evitar el pago de impuestos a partir de enero de 2011.
Esto demuestra cómo el incremento del IEPS a los productos del tabaco es doblemente benéfico, por un lado fortalece la capacidad recaudatoria del Estado Mexicano, permitiendo un incremento en los recursos destinados al sector salud y disminuye el consumo en la población.
En el mismo contexto, Ernesto Saro enfatizó que “las políticas fiscales a productos del tabaco son las medidas más efectivas para prevenir y reducir el consumo de tabaco, pues impactan directamente en el poder adquisitivo de las personas, particularmente entre la población más vulnerable, como son los niños y jóvenes”.
La Organización Mundial de la Salud recomienda implementar impuestos a los productos de tabaco equivalentes al 75% del precio al público (OMS, 2011). Ante el incremento de los precios, los fumadores reducen su consumo (dejan de fumar o reducen la cantidad que fuman).
Por su parte, el Director para Iniciativas del Control de Tabaco de la Fundación InterAmericana del Corazón, el maestro Erick Antonio Ochoa, comentó que las organizaciones sociales que promueven acciones para controlar el consumo de tabaco, invitan a los nuevos integrantes del Poder Legislativo a continuar impulsando políticas públicas que ayuden a prevenir y controlar el consumo de tabaco, lo cual beneficia la salud de todos los mexicanos.
“Ratificamos nuestro llamado a los senadores y diputados de todos los partidos políticos que integran la LXII Legislatura, para que sigan apoyando la creación de políticas efectivas que apoyen el incremento de impuestos a cigarros, espacios 100% libres de humo de cigarro, así como el aumento al 50% de las imágenes y leyendas de advertencia sanitaria en los empaques de este tipo de productos, ya que son medidas que no sólo apoyan al sector salud, sino fortalecen al sistema recaudatorio en México”, afirmó.
Erick Antonio finalizó, “es importante que el gobierno trabaje en conjunto a la sociedad civil, ya que estas organizaciones hemos sido creadas para ser la voz de la sociedad”.