Por Guillermo Pimentel Balderas

El dirigente nacional de la CROC, Isaías González Cuevas, afirmó que el incremento en la desigualdad social son los más de doce millones de mexicanos que durante los últimos cinco años se sumaron a la línea de pobreza y subsistencia alimentaria, además de que los 14 millones recién contabilizados por el INEGI,  que ante la falta de empleo, se desempeñan en la economía informal con salarios irrisorios y sin ninguna prestación de ley.

En entrevista, el líder nacional croquista condenó los salarios mínimos para 2012, que fue unilateralmente acordada su resolución con una retabulación de sólo 4.2 por ciento, equivalente a 2.45 pesos adicionales, por lo cual sentenció que “no se debe continuar con esa política salarial “poquitera” que significa una afrenta para los trabajadores y acerva  las condiciones de desigualdad e injusticia social.

El candidato del PRI al Senado de la República subrayó que  “La pobreza y olvido de los más marginados son dos cosas que no se pueden ocultar, como lo han pretendido los gobiernos panistas que han demostrado su ineficacia para gobernar e impulsar un crecimiento económico comprometido con el empleo bien remunerado y con los beneficios de la seguridad social”.

“Subrayó que esa es la insensible herencia social de los gobiernos panistas, pero que el nuevo gobierno encabezado por Enrique Peña Nieto, tendrá que resarcir con una mayor cobertura social, programas de empleo permanentes, robustecimiento de los salarios,  impulso a la actividad productiva nacional y estrecha vinculación con los Institutos de Educación Superior, para que sus egresados, lejos de sumarse al desempleo o la informalidad, contribuyan con todas sus capacidades al desarrollo del país.

“Lo que México requiere son políticas activas y permanentes de generación de empleos enlazadas a medidas de robustecimiento del aparato productivo nacional y no sólo esperar a que la inercia de un crecimiento económico insuficiente e inconstante, satisfaga las necesidades de mejores salarios y puestos laborales de calidad”. 

El candidato del PRI al Senado de la República, dijo que empezar a revertir la pobreza y olvido social provocada por  los gobiernos panistas requiere de políticas activas de empleo estrechamente vinculadas al sector productivo y a los  institutos de educación superior, además de ampliar sustancialmente los programas de atención social.

Puntualizó que esas medidas previstas en la plataforma política del PRI, también involucran dar impulso especial a las micro y pequeñas empresas donde se concentra más del 70 por ciento del empleo y situar los salarios en su real dimensión conforme al índice inflacionario.

Enfatizó que, aunque se han logrado retabulaciones salariales por arriba de la inflación,  las alzas constantes en los precios de los alimentos, gas doméstico y tarifas eléctricas nulifican ese esfuerzo y empobrecen a las familias trabajadoras.

Mencionó que de acuerdo a investigadores del Centro de Análisis Multidisciplinarios de la UNAM, el salario mínimo en este sexenio acumula una pérdida adquisitiva de 47.1 por ciento inducida por los aumentos constantes a la energía eléctrica, gasolinas y diesel que impactan en los precios de los alimentos y servicios.