El presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología, diputado José Isabel Meza Elizondo, señaló que México ocupa el lugar 60 a nivel mundial en desarrollo de ciencia, tecnología e innovación.

Lamentó que a pesar de que la ley de Ciencia y Tecnología  establece aplicar el uno por ciento del Producto Interno Bruto, para este año será solamente de punto cuatro por ciento, lo cual es insuficiente.

“No es posible que México, estando en el 15º lugar en el aspecto económico, en ciencia y tecnología se encuentre en el 60”, dijo.

Afirmó que será labor de la Comisión que preside trabajar para que esa ley no se convierta en letra muerta.

En  entrevista, mencionó que de contar con mayores recursos estos serían destinados para un número mayor de becas y la construcción de espacios para la ciencia, tecnología y la innovación.

“Estamos en la posibilidad de trabajar para encontrar los recursos suficientes que nos brinden la oportunidad de más espacios para la ciencia y la tecnología y, sobre todo la innovación”.

Informó que la Comisión trabaja en una iniciativa para que la ciencia, la tecnología y la innovación se interlacen con las políticas económicas, sociales y mercantilistas, de todo aquello que pudiera resultar de impacto positivo para la sociedad.

“Lo que se pretende es que la política social, la económica y la mercantil se puedan inter-lazar con la ciencia, tecnología y de innovación, para que los ciudadanos tengan un mejor desarrollo”.

La iniciativa precisa que en el país las políticas en materia de ciencia, tecnología e innovación no están vinculadas a otras políticas públicas.

Señala que para que este conjunto de políticas genere efectos sinérgicos, es necesaria la articulación entre ellas, dado el papel que pueden asumir en la resolución de diferentes problemáticas relativas al desarrollo productivo (agrícola, industrial y de servicios), la competitividad, la educación, la salud, la seguridad, la preservación de la cultura y otros campos.

El propósito es incluir la articulación de las políticas científicas, tecnológicas y de innovación con otras políticas (económica, social, comercial) como uno de los principios orientadores del gobierno federal en pro del desarrollo nacional.

Es fundamental impulsar la investigación y desarrollo sobre bases regionales y subregionales, tomando en consideración las áreas geográficas nacionales y el impacto que en la planta productiva puede tener la investigación y el desarrollo tecnológico, señala el documento.

El documento establece que datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), precisan que la inversión en ciencia contribuye con 25 por ciento al crecimiento económico en los países en desarrollo y con el 50 por ciento del crecimiento de los países desarrollados.