Delincuencia organizada
La Comisión Permanente del Congreso exhortó a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) a incrementar los operativos de vigilancia de las bombas despachadoras de gasolina en las estaciones de servicio que han sido sancionadas por incurrir en irregularidades al despachar combustibles.
Aunado a ello, los legisladores hicieron un llamado a la Procuraduría para que intensifique las acciones de fomento a la denuncia de las estaciones de servicio que incurren en estas irregularidades.
En el dictamen aprobado en la sesión del pasado miércoles, se señala que aun cuando la Profeco mantiene de forma permanente el Programa Nacional de Verificación de Combustibles, las irregularidades en las gasolineras que verifica, lejos de disminuir, van en aumento.
Se precisa que en el primer trimestre de 2014 la dependencia halló anomalías en el 58 por ciento de las estaciones revisadas, y entre enero y marzo de 2015 las fallas alcanzaron 66 por ciento. Incluso algunas estaciones de servicio incurren en anomalías, a pesar de haber sido inspeccionadas en más de dos ocasiones en los últimos 15 meses y continúan en funcionamiento.
El documento señala que las 570 gasolineras revisadas en los primeros tres meses del año y las mil 792 revisadas en 2014 suman una quinta parte de las 11 mil 246 franquicias que existen en territorio nacional, por lo que el riesgo para los consumidores puede ser latente en el resto.
El dictamen refiere que diversos medios de comunicación han dado a conocer que en Michoacán, Tamaulipas y Guerrero, donde existe presencia del crimen organizado, la labor de la Profeco es aún más limitada, pues ha revisado menos de 10 por ciento de las estaciones que hay en esos lugares.
En las consideraciones del dictamen se subraya la necesidad de promover y proteger los derechos e intereses del consumidor en las más de 10 mil estaciones de servicio Pemex en el país que comercializan gasolinas y diésel.