*Breve y reflexiva historia de nuestro oro negro
México, primera derrota política-militar al imperialismo británico en la Guerra Civil Española en víspera de la II Guerra Mundial
Por Ramón O’Neill Santos
Al comenzar la presidencia de la República de México el michoacano Lázaro Cárdenas del Río (1934-1940) el mundo se encontraba en una situación de ajustes imperiales en virtud a la Gran Depresión de 1929-1930 y por las consecuencias derivadas de la Gran Guerra o Primera Guerra Mundial.
A ambos lados del Océano Atlántico se deban dos procesos sociales de contenido revolucionario. En México con el gobierno de Cárdenas del Río y en España con el gobierno de la República Española. Los cuales estaban conectados ya que se complementaban política, económica y militarmente.
El proceso revolucionario mexicano se remontaba a la propia Revolución Mexicana que dio lugar a la primera constitución política en el mundo (1917) que reconocía los derechos de los trabajadores, campesinos e indígenas. Y además, y no menos importante, establecía el derecho de propiedad de la nación mexicana sobre las riquezas del subsuelo del territorio nacional y de las aguas nacionales mexicanas. Cárdenas del Río - el “Tata” como amorosamente lo llamaban los indígenas – desde el inicio de su mandato comenzó a hacerles justicia acelerada a los trabajadores, campesinos e indígenas que por décadas habían esperado por ella.
Cárdena enmarcaba legalmente su actuar en la propia Constitución Mexicana y en el Plan Sexenal que su partido había aprobado previo a que ganara la presidencia del país. (1)
Por su parte en Europa occidental, el gobierno de la República Española – electo por sufragio universal y el que sustituyó a la monarquía por la república – se enfrentaba con iguales problemas sociales y económicos que México, entre ellos: latifundios, explotación inmisericorde de los trabajadores y campesinos, intervención de la Iglesia en el Estado, analfabetismo, una casta militar conservadora y la resistencia de la burguesía y aristocracia nacional y extranjera a los cambios políticos, económicos y sociales que requería España.
El gobierno de la República Española, a diferencia del gobierno de Cárdenas, carecía de la experiencia de cómo implementar la justicia social para su pueblo, razón por la cual recurría al modelo y experiencia mexicana para realizarla por antecederla ésta.
El gobierno cardenista, por su parte, carecía de lo que al gobierno republicano español le sobraba: ciencia, tecnología y capital estatal. Esto se debía a la destrucción de la infraestructura causada por la propia Revolución Mexicana y por el ilegal bloqueo que Estados Unidos de América le impuso a México durante la Gran Guerra (1914-1918), que le impidió a México realizar, de acuerdo al Derecho Internacional, comercio con los países beligerantes y a estos con México, por haberse mantenido México como Estado neutral. (2)
España, que no había sufrido las consecuencias negativas de una revolución social, y que también se mantuvo neutral en la conflagración mundial, a diferencia de México, sí pudo ejercer sus derechos comerciales con los beligerantes sin impedimento alguno. Razón por la cual tenía repletas sus arcas nacionales.
Fueron esos elementos los que dieron lugar a una relación nueva y muy amplia entre el gobierno cardenista y el gobierno republicano. México aportaba su experiencia revolucionaria social y España republicana aportaba la ciencia, tecnología y capital en múltiples proyectos económicos y militares.
Nueva relación porque por vez primera la antigua metrópolis y el antiguo virreinato coincidían en un común proyecto de libertad y de justicia social que podía servir de modelo de reencuentro para el resto de las antiguas colonias española en América. (3)
Al igual que en México, las fuerzas contrarrevolucionarias en España y en el exterior se oponían al cambio social y trataron mediante un golpe de Estado fallido, dirigido por el Gral. Francisco Franco, entre otros, derrocar al gobierno republicano español. Así comenzó lo que sería la Guerra Civil Española (1936-1939).
Al confrontarse Inglaterra con el fallido golpe de Estado (el cual en gran medida promovió) y en el cual participaron militarmente Alemania e Italia) optó por recurrir al bloqueo militar por mar y tierra de la República Española con el apoyo de la Alemania nazi, Francia y la Italia fascista mediante el famoso “Comité de No Intervención”, mientras simultáneamente permitía el abastecimiento de armas y el apoyo de fuerzas militares nazis y fascistas al bando franquista. (4)
Ignorando en el proceso Inglaterra el propio contenido de la Liga de las Naciones (antecesora de la organización de la Organización de las Naciones Unidas) que prohibía, en uno de sus artículos, la intervención de terceros Estados en asuntos internos de otro de sus estados. Y que establecía en otro de sus artículos la obligación de sus miembros de apoyar militarmente a cualquiera de ellos que ilegalmente fuera militarmente atacado (caso de la República Española) por otro Estado - fuera o no miembro de la Liga de las Naciones - a solicitud del Estado agredido.
De los Estados que conformaban la Liga de las Naciones, solo México reaccionó públicamente apoyando inmediatamente a la República Española de acuerdo a la solicitud de ésta y a los estatutos de la Liga de las Naciones. Porque entendió que el Derecho Internacional o de Gentes respaldaba al Gobierno español. Gobierno que estaba sufriendo una agresión militar por parte de otras potencias bajo el disfraz de guerra civil con la connivencia del Comité de No Intervención. Y porque entendió que esa violación al Derecho Internacional se le podía aplicar en el futuro inmediato a otro miembro de la Liga de las Naciones, incluyendo al propio México que enfrentaba serios reclamos y demanda de terceras potencias derivadas de su propia revolución. (5)
Es sabido que el gobierno de Cárdenas le cursó inmediatamente a los republicanos españoles 20,000 fusiles máuser y 20,000,000 de cartuchos para máuser del arsenal mexicano. Lo que no se sabe públicamente es la gran cantidad de armamento, de todo tipo, (pistolas, granadas, fusiles, fusiles-ametralladoras, ametralladoras, morteros, ametralladoras anti tanques, ametralladoras y cañones anti aéreos, cañones de costa, cañones de campañas, obuses, aviones de combate, cartuchos diversos, etc., etc.) que el gobierno cardenista le hizo llegar a la República Española, del continente europeo y americano, mediante triangulación durante los primeros 8 meses de la llamada “Guerra Civil Española”. Rompiendo con ello el bloqueo establecido a la República Española por parte de Inglaterra, Alemania, Italia, y Francia con la anuencia y tolerancia de Estados Unidos de América. (6)
Triangulación que le permitió al Gobierno Republicano sostenerse en el poder combatiendo a los imperios intervencionistas con las armas recibidas de México (compradas con dinero republicano); así como con el apoyo de oficiales de las fuerzas armadas mexicanas que extraoficialmente envío el presidente Cárdenas a combatir con el bando republicano.
Posteriormente entró (tardíamente a nuestro entender) la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas a apoyar a la República Española con una gran cantidad de armamentos y de oficiales. Pero a diferencia de México, la U.RR.SS.SS. le imponía a los republicanos sus condiciones en la conducción política-militar de la guerra y le vendía caro mucho armamento obsoleto sobrante de la Gran Guerra o Primera Guerra Mundial.
Ya para el año 1938 el presidente Cárdenas sabía, por informes de la inteligencia militar (uno de ellos el artista plástico Davis Alfaro Siqueiros) (7) y diplomática mexicana que la derrota de los republicanos era casi inevitable de no darse un cambio drástico en la correlación de fuerzas políticas y militares en el territorio español y en el ámbito internacional.
Además, estaba consciente el presidente Cárdenas de que la Guerra Civil Española era el preámbulo de una nueva conflagración mundial (II Guerra Mundial); de la necesidad del imperio inglés de mantener su predominio en el Mar Mediterráneo (vía marítima que por conducto del canal de Suez lo enlazaba con sus colonias en el Oriente); de la alianza manifiesta de los imperios en contra de cualquier proceso revolucionario que afectara sus interese imperiales (fueran estos socialista o nacionalistas revolucionarios); y de la política del “Buen Vecino” que implementaba Estados Unidos de América en el continente americano en busca de apoyo para la conflagración mundial que se acercaba.
Contemplando el “Tata” Cárdenas el panorama internacional y sabiendo que en lo nacional contaba con el apoyo de la inmensa mayoría del proletariado, campesinado, de los indígenas y de las fuerzas armadas mexicanas toma, el 18 de marzo de 1938, la revolucionaria decisión de expropiar y nacionalizar la industria petrolera de México. La cual pertenecía en un 70% al capital inglés y el 30% restante al capital norteamericano.
Por múltiples estudios es conocida la conducta arbitraria, prepotente y explotadora que los petroleros ingleses aplicaban a los trabajadores mexicanos. También, su arrogancia desafiante al desacatar el laudo pronunciado por el Grupo 7 de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (18/dic/1937), y con la decisión confirmadora (3/marzo/1938) de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; así como la proeza de los trabajadores petroleros en alianza con su gobierno de tomar en sus manos y echar a producir la industria petrolera y con ello darle al imperialismo una lección de soberanía y dignidad nacional mientras simultáneamente le rompían el bloqueo comercial que le habían impuesto a México. (8)
Lo que es poco conocido en la expropiación petrolera son las tácticas y estrategias internacionales de enmarque y consecuencias legales, políticas y militares. Veamos.
Cuando el presidente Cárdenas expropia y nacionaliza sabía que los petroleros podían solicitarle apoyo diplomático, legal y militar a sus gobiernos (como lo hicieron) en contra de la expropiación. También sabía que le podía contestar (como lo hizo) que el Gobierno expropió soberanamente ajustándose a la Constitución Mexicana, y que no aceptaría dilucidar controversia(s) entre ellos y el Gobierno si no era mediante los procedimientos de arbitraje y conciliación de México. Ya que a los procedimientos de conciliación y arbitraje contenidos en los estatutos de la Liga de las Naciones no se podía recurrir en virtud del total desconocimiento de los estatutos de dicha organización por parte de Inglaterra en su actuar.
También, debió contemplar el presidente Cárdenas la posibilidad de una intervención militar al territorio mexicano por parte de Inglaterra. Pero sabía que tácticamente eso le implicaría a Inglaterra la disyuntiva siguiente:
1- optar por la invasión en defensa de sus intereses imperiales petroleros en México debilitando el bloqueo marítimo a la República Española, lo que implicaría para la República una apertura en el bloqueo marítimo y un cambio en la correlación de fuerzas; y para Italia y Alemania la posibilidad de apoderarse del Mar Mediterráneo, u
2- u optar por no invadir, manteniendo el bloqueo a los republicanos, mantener la correlación de fuerzas contraria a la República Española y el control del Mar Mediterráneo aunque le implicara la pérdida del petróleo mexicano.
El imperio inglés optó por NO invadir en consideración a lo antes expresado y porque sabía que eso conllevaría abrir un frente militar al otro lado del Océano Atlántico, lo cual debilitaría su propia capacidad defensiva en caso de una agresión de Alemania y/o de Italia.
Además, debió de pesar en la decisión británica lo siguiente:
1- Saber que la correlación de fuerzas sociales y políticas en México estaban a favor de la expropiación,
2- la gran incertidumbre de no saber qué cantidad del armamento comprado por México no se había triangulado a los republicanos españoles, (9)
3- saber que por vez primera México contaba con una armada de guerra defensiva moderna de 7 buques y 13 lanchas guardacostas (con armamento moderno) construidas y compradas a crédito en España,
4- el hecho de que los marinos mexicanos habían participado en simulacros de guerra con la Armada Española y que habían cruzado el Atlántico navegando las naves mencionadas, incluyendo las “LANCHAS GUARDACOSTAS”. (10)
5- la participación en la Guerra Civil Española de una nueva generación de oficiales del Ejército Mexicano lo que le daba conocimiento de las nuevas armas y de las nuevas tácticas y estrategias militares,
6- saber que el pueblo mexicano sabía de armas y que estaba curtido en la guerra producto de la Revolución Mexicana,
7- así, como saber que muchos brigadistas internacionales (mexicanos y extranjeros) se habían establecidos en México luego de salir de España. (11)
No obstante, no fue descartada inmediatamente la decisión de invadir. El imperio inglés debió de tomar en consideración los informes de inteligencia de sus agregados militares en México.
Uno de ellos expresaba: “El ejército mexicano no es de los mejores armados del mundo, tampoco es de los mejores alimentados (pasando a describir lo que serían tacos), con ese alimento y con sus mujeres detrás pueden caminar kilómetros y kilómetros, sin que se pueda cuestionar su valor. Si eso digo de ellos, de los indígenas puedo decir que pueden caminar días sin alimento alguno, y tampoco puedo cuestionar su valentía. Podemos invadir pero nunca lo podremos ocupar ni dominar, con las guerrillas nos acabarían. Mi recomendación es: no invadir”.
Otro expresaba: “Lázaro Cárdenas es indígena cien por cien, si acaso corre por sus venas un poco de sangre blanca. Es un hombre de pocas palabras, pero lo que promete lo cumple”.
Con la expropiación y nacionalización petrolera, México, no solo hizo valer su soberanía y su derecho a la autodeterminación en lo referente a la explotación de los recursos del subsuelo para beneficio de sus ciudadanos, también le hizo patente a los imperios que el Derecho Internacional era (y debe ser) en su observancia y aplicación igual para todos los Estados.
Además, le aplicó, sin disparar un tiro, la primera derrota político-militar al imperio británico en el transcurso de la Guerra Civil Española y en víspera de la II Guerra Mundial al privarlo de su enclave petrolero imperial en el territorio mexicano. Un enclave igual de importante que el que mantenía Estados Unidos de América en la Zona del Canal de Panamá y en el archipiélago de Puerto Rico. (12)
Sería interesante realizar estudios profundos para determinar hasta qué grado tuvo que ver la expropiación petrolera en México con el derrumbamiento del mayor imperio en ese momento: el imperio británico. Al no contar a su total disposición el imperio británico con el petróleo mexicano en la II Guerra Mundial a diferencia de cómo contó con él en la Gran Guerra. Cuando irónicamente México sufrió un gran desabasto de petróleo y sus derivados.
¡Ni para cocinar tenían las mujeres mexicanas. Las mismas que acompañaban a sus hombres (soldados) caminando kilómetros y kilómetros, y a sus indígenas caminando días sin alimento alguno!
Nota 1- Cuando a Cárdena le preguntaban por qué ha hacía reforma agraria o por qué establecía programas agrarios, bancos agrarios, construía escuelas, autorizaba aumentos salariales, etc., contestaba: “Porque la Constitución lo expresa y porque se acordó en el Plan Sexenal de mi partido previo a mi elección como presidente de México”. Algo similar haría décadas después el presidente Hugo Chávez Frías al aplicar la nueva Constitución de la de la República Bolivariana de Venezuela y las leyes habilitadoras.
Nota 2- En una beligerancia los Estados nacionales que se mantienen neutrales pueden realizar comercio con todos o con parte de los Estados nacionales beligerantes. Estados Unidos de América, al igual que España, realizó comercio con los beligerantes de la Gran Guerra.
Nota 3- A finales del siglo XX y a principio del siglo XXI se dio un tipo de alianza parecido entre España y Estados Unidos de América, pero con fines imperiales (España se olvidó del hispanoamericanismo y aceptó el panamericanismo). Entonces las bancas de ambos países estaban boyantes.
Nota 4- Baste recordar los miles de soldados italianos que apoyaron abiertamente a los realistas de Francisco Franco y el escuadrón aéreo Cóndor que destruyó la ciudad de Güernica en el país Vasco.
Nota 5- México enfrentaba reclamaciones y demandas por daños causados por las batallas durante la Revolución Mexicana y por las expropiaciones de terrenos que había realizado para hacer la reforma agraria. Por otro lado, las empresas petroleras de EE.UU.A. buscaban evitar que se aplicara retroactivamente el articulado que tenía que ver con el derecho de propiedad de la nación sobre las riquezas del subsuelo.
Nota 6- Esa información hoy se encuentra con lujo de detalles en la magnífica tesis doctoral del historiador puertorriqueño José Alejandro Ortiz Carrión. Eminencia en la materia.
Nota 7- David Alfaro Siqueiros fue uno de los excelsos artista plástico mexicano del S.XX. Se sabe que participó militarmente como brigadista internacional en la Guerra Civil Española. Lo que es poco conocido es que participó secretamente como oficial de reserva del ejército mexicano en la Guerra Civil Española. Como tal tenía que responderle e informar al Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas Mexicana, al general y presidente Lázaro Cárdenas del Río.
Nota 8- Los industriales petroleros británicos ante la posibilidad de una expropiación se adelantaron y vaciaron sus cuentas bancarias, llevaron a aguas internacionales sus buques cisternas, sacaron de México a sus técnicos e ingenieros juntos con los mexicanos afines y sabotearon las maquinarias. Luego de la expropiación establecieron un bloqueo al petróleo mexicano para obligar a los mexicanos a retractarse de la expropiación. El gobierno de Cárdenas en alianza con los trabajadores reactivó la producción de petróleo y logró romper el bloqueo usando buques cisternas comprados a Italia mediante trueque. México le dio petróleo e Italia le dio buques cisternas a cambio.
Nota 9- A diferencia de la U.RR.SS.SS. a México nunca le interceptaron un envío de armamentos triangulado a la República Española. Los enemigos de la República y de México sabían de las compras, pero nunca pudieron interceptar una triangulación. Así de efectivo era el servicio de inteligencia que los mexicanos establecieron que se burlaron de los servicios de inteligencia y contrainteligencia de Inglaterra, Francia, Alemania, Italia y EE.UU.A. Sin olvidar a los de los Estados a los cuales les compró los armamentos: Bélgica, Estonia, Lituania, Turquía, Noruega, Suecia, Polonia, Portugal, Austria, Canadá y otros. (Inclusive le compró a Inglaterra, Francia, Alemania, Italia y EE.UU.A)
Nota 10- Las lanchas artilladas guardacostas son para navegar cerca de las costas y no para navegar en alta mar. El haber podido cruzar el Atlántico implicó una gran pericia.
Nota 11- La creación de las brigadas internacionales fue la contestación militar de las fuerza progresistas y de izquierda a la intervención de la Alemania nazi y de la Italia fascista. De América Latina fue Puerto Rico, de acuerdo a su población y tamaño territorial, la nación que más brigadistas aportó (sobre 50). Uno de ellos: Pablo de la Torrente Braú (descendiente del ínclito patriota puertorriqueño del S.XIX Salvador Braú), quien murió combatiendo en España. Otro fue el nacionalista Carmelo Delgado, quien prefirió morir fusilado antes que aceptar la intervención del embajador de EE.UU.A. a su favor
Nota 12- Un enclave territorial es un territorio de un país establecido en el territorio de otro país. En su enclave petrolero los ingleses no dejaban entrar a las fuerzas armadas mexicanas bajo el pretexto legal de que era propiedad privada (Uno de los oficiales que no pude entrar a revisar el maltrato a los trabajadores fue Lázaro Cárdenas cuando era un joven capitán). En el mismo tenían su propia policía, su propio sistema legal y hasta sus propias prisiones. Hacían y deshacían a su antojo y trataban a los trabajadores mexicanos como esclavos - los colgaban de los pulgares, los azotaban y los enjaulaban como animales en su propia patria .