El diputado Carlos Augusto Morales López propuso reformar la Ley que regula los beneficios de quienes hayan ocupado la titularidad del Poder Ejecutivo Federal.
En su exposición de motivos precisa que los privilegios de los cuales gozan los ex presidentes de la República mexicana con cargo al erario público, resultan una carga pesada para el Estado y son una especie de premio vitalicio para este sector de ex servidores públicos.
Las pensiones vitalicias a los ex mandatarios, destaca, carecen de sustento jurídico. “Hasta el día de hoy, sin ninguna base normativa válida se ha otorgado a los ex presidentes una pensión equivalente al ingreso del máximo tabulador de un Secretario de Estado. No se cuenta con elementos orientativos que justifiquen esta decisión”, menciona el legislador en su documento.
Con esta iniciativa se propone que las personas que hayan ocupado la titularidad del Poder Ejecutivo Federal, percibirán una pensión especial equivalente al monto de la plaza presupuestal más alta de director de área de la Administración Pública Federal, de manera vitalicia.
Este beneficio será suspendido al momento de que el titular obtenga ingresos, sueldos o compensaciones de cualquier tipo adicionales a la pensión referida.
También busca que quienes hayan ocupado la Presidencia de la República contarán con la protección de no más de 15 miembros del cuerpo de guardias presidenciales, que serán coordinados por un oficial con rango de coronel Diplomado del Estado Mayor, dentro del territorio nacional.
El beneficio será reducido hasta concluir un periodo de diez años, a partir del inicio de esta prestación.
En el documento enviado a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública se resalta que ningún país de América Latina tiene una pensión similar a México, pues los ex presidentes de Chile tienen asignada una pensión de 145 mil pesos y en Colombia de 147 mil.