El Banco de México debe dejar de operar bajo la premisa de controlar la inflación y comenzar por hacer prioritario el crecimiento económico sostenido del país, afirmó el senador Benjamín Robles Montoya.
A través de una iniciativa, el legislador por Oaxaca planteó modificar el artículo 28 de la Constitución para que además de procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional, el Banco Central promueva el desarrollo económico sostenido en coordinación con Gobierno federal.
Al fundamentar su propuesta, el legislador del PRD señaló que de acuerdo con lo establecido en la Constitución, el Banco de México tiene el objetivo primario de procurar la estabilidad de precios, “es decir, mantener la inflación baja para así preservar el poder adquisitivo de la moneda nacional”.
Robles Montoya reconoció que la política económica mexicana ha mostrado resultados macroeconómicos positivos a partir de la actual manera de operar del Banco de México.
“Sin embargo, la microeconomía de la gran mayoría de las familias del país no lo percibe así, ya que persisten bajos salarios, desempleo, emigración, escasa absorción de empleo en el sector formal de la economía, la desarticulación de los sistemas productivos y financieros, así como el aumento de la pobreza y la exclusión social”, advirtió.
Apuntó que actuales atribuciones del Banco de México tienen su origen en las “amargas” experiencias de hiperinflación, los desequilibrios fiscales en la balanza de pagos y las crisis recurrentes de fin de sexenio que como país hemos experimentado en el pasado.
“Si bien la independencia de la institución ha contribuido a controlar con relativo éxito estos fenómenos, los resultados hasta hoy obtenidos no son suficientes para lograr un comportamiento económico funcional que nos permita alcanzar niveles aceptables de desarrollo”, subrayó.
Por esas razones, Benjamín Robles consideró imperativo que el Banco Central comience a actuar bajo políticas que contribuyan al crecimiento económico sostenido no inflacionario, así como a la generación de empleos, la protección social y el incremento generalizado del nivel de vida de la población.
“Actuar bajo estas políticas, convertiría al Banco Central en un órgano protagónico del crecimiento económico”, concluyó.
La iniciativa fue turnada a las comisiones unidas de Puntos Constitucionales; de Hacienda y Crédito Público; y de Estudios Legislativos, Segunda, para su análisis y posterior dictamen.