El presidente de la Comisión de Asuntos de la Frontera Sur-Sureste, diputado Óscar Eduardo Ramírez Aguilar se manifestó por establecer un presupuesto que combata la pobreza en las entidades ubicadas en esta zona.
Señaló que entre las necesidades que enfrentan Oaxaca, Chiapas y Guerrero están el suministro de agua, carreteras y vivienda, por lo que trabajarán en aumentar el presupuesto a programas que impulsen estos rubros, como es el Fondo Regional (Fonregión), el cual tuvo un ingreso de 7 mil 500 millones de pesos el año pasado.
En entrevista, el legislador resaltó que para satisfacer esas necesidades, la Comisión establecerá relaciones con dependencias, gobernadores, presidentes municipales y el Gobierno Federal.
“De lo que se trata es que las entidades que integran la frontera sur-sureste obtengan mayor presupuesto que contribuya a resolver las insuficiencias en sus municipios. Esa es nuestra labor”, recalcó.
Precisó que en su plan anual de trabajo, impulsarán un desarrollo paralelo entre las entidades del centro y norte del país con aquellas que integran la frontera sur y que presentan mayor rezago en su productividad y oportunidades. “Debemos impulsar una línea transversal de crecimiento en todas las entidades; no podemos ni debemos perder el tiempo en posiciones partidistas”, consideró.
Señaló que otra prioridad será dignificar la frontera en materia de seguridad pública y tributación. “Son temas amplios que sin duda vamos a trabajar en el eje rector de lo que será el nuevo gobierno”, indicó.
“Nos vamos a encargar de enaltecer esas fronteras, instituciones y ser garantes a los derechos humanos de quienes pasan o transitan por el país”, advirtió el legislador.
Detalló que el tema de los migrantes es un asunto sin resolver, toda vez que son atropellados sus derechos, y sufren por actos de corrupción tanto en instituciones nacionales como de Centroamérica.
A su vez, la diputada Teresa Mojica Morga (PRD) precisó que la frontera sur-sureste abarca Guerrero, Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo, Campeche y Tabasco, considerados como estados marginados.
El aumento de la migración de Guatemala a Chiapas ocasiona la inseguridad y delincuencia organizada, advirtió, y añadió que “nos quejamos del trato que nos dan en Estados Unidos, cuando no somos capaces de tratar a guatemaltecos y centroamericanos de manera digna”.
Precisó que los recursos asignados a los estados de la frontera sur-sureste, principalmente Guerrero, Chiapas y Oaxaca, no alcanzan para cubrir su infraestructura básica ni impulsar el desarrollo social.
Por ello, sugirió que el Presupuesto de Egresos del 2013 incluya más recursos para atender de manera específica, el tema de los migrantes.
Agregó que “tenemos que disminuir la desigualdad que se presenta entre los estados del norte, que tiene mayor infraestructura, presupuesto y niveles de vida, frente a las regiones más pobres; si no los atendemos ahora, los vamos a condenar a la precariedad total”.