El diputado Gabriel de Jesús Cárdenas Guízar aseguró que el sector de salud en nuestro país vulnera constantemente los derechos de los internos de pregrado, de prestadores de servicio social y residentes médicos, pues las instituciones privadas y públicas del ramo emplean un sistema de guardias que consiste en jornadas de servicio consecutivas y extensas.
Integrante de la Comisión de Juventud, advierte que las amplias horas de servicio continuo en los hospitales implica riesgos en la salud de los prestadores, y por ende, de los pacientes, ya que la acumulación de sueño deriva en fatiga, depresión, ansiedad, síndrome de Burnout, así como deterioro en la capacidad psicomotriz, física y psicológica, entre otros padecimientos.
Precisa que el internado de pregrado y el servicio social en el sector salud son un requisito que deben cumplir los estudiantes de medicina durante sus últimos años en la carrera, para obtener su título universitario. A pesar de que esto no se categoriza en las leyes como un trabajo, los estudiantes deben prestar su servicio hasta por tres días consecutivos o de 40 a 80 horas a la semana.
Por su parte, los residentes médicos, quienes se adiestran en una especialidad después de graduarse, tienen horarios similares, aunado a que en días festivos y fines de semana las guardias son de 24 horas continuas, lo que “infringe de manera excesiva las jornadas de trabajo ordinarias y semanales establecidas en la ley”.
“Estas malas e inhumanas prácticas han prevalecido durante años. Difícilmente, los residentes médicos, prestadores de servicio social e internos de pregrado, pueden exponer las condiciones laborales en las que se encuentran; sin embargo, si ellos se manifestaran para hacer valer sus derechos, se provocaría, por obvias razones, un gran impacto en la salud de la población”, subraya Cárdenas Guízar.
En vista de la problemática, el diputado por Veracruz promueve dos iniciativas para reformar las leyes General de Salud y Federal del Trabajo, para establecer un máximo de 48 horas laborales a la semana y ocho por día en estas tres actividades, además del derecho a periodos de descanso anual y semestral, trato digno, así como condiciones adecuadas para desarrollarse profesionalmente y cuidar su salud.
Cárdenas Guízar subraya que en México no se menciona que muchos de los casos de negligencia son consecuencia de las condiciones en las que los futuros médicos y especialistas se ven obligados a prestar su servicio. Su periodo de descanso no es el adecuado, y su capacidad de atención y habilidades psicomotoras se limita, ocasionando errores en sus actividades.
Las jornadas de trabajo y periodos de descanso justos, afirma, son importantes dada la tarea que realizan y el grado de responsabilidad que recae en sus manos: la salud y vida de un ser humano. “Necesitan estar atentos, tener un juicio flexible y ser rápidos en su reacción, especialmente frente a situaciones de emergencia”, enfatiza.
El legislador panista refiere que los internos de pregrado, los prestadores de servicio social y los residentes médicos ocupan un lugar muy importante en el mecanismo asistencial del sistema de salud mexicano.
Asimismo, la medicina es de las pocas profesiones que continúa siendo reconocida por la gran mayoría de la población como la más noble por su alto sentido humano y el nivel de contribución que da en servicio y bienestar a la población.
Empero, “es vergonzosa la condición en que por años ha permanecido y sigue permaneciendo este sector, y que a la fecha no se haya volteado la mirada hacia ello, lo que mantiene a este sector oculto y desprotegido”, señala.
Por tales motivos “se hace imperiosa la necesidad de que nosotros, como legisladores, establezcamos sus derechos y tomemos las acciones legislativas necesarias para cambiar esta vulnerabilidad de sus derechos laborales”, concluye el diputado.