El presidente de la República, Enrique Peña Nieto, entregó el lunes pasado en Palacio Nacional el Premio de Investigación de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) a los ganadores de las ediciones correspondientes a 2012, 2013 y 2014.

Un total de 11 investigadores -de los 14 premiados- estuvieron presentes en la ceremonia y recibieron el reconocimiento, la distinción más importante que otorga la AMC, la de mayor prestigio a nivel nacional, y la cual favorece a jóvenes científicos que no hayan cumplido, en el caso de los hombres 40 años y en el de las mujeres, 43 años, y que realicen investigación de punta en las áreas de ciencias exactas, naturales, sociales, humanidades, ingeniería y tecnología.

Ante la presencia de miembros del gabinete, expresidentes de la Academia, premiados, integrantes de la comunidad científica y académica, familiares e invitados especiales, el jefe del Ejecutivo apuntó que la historia demuestra que las naciones que han privilegiado el desarrollo científico y tecnológico, aquellas que han fomentado la investigación, son precisamente las que hoy ofrecen una mejor calidad de vida a la población.

“Por ello, en el gobierno de la República estamos promoviendo la generación y utilización del conocimiento, particularmente de carácter científico, para acelerar el desarrollo integral de nuestro país. De hecho, más del 30% de las líneas de acción del Plan Nacional de Desarrollo están sustentadas en ciencia, tecnología e innovación (CTI)”.

Agregó que en el 2014 se puso en marcha el Programa Especial de Ciencia, Tecnología e Innovación y que a la fecha hay avances en cada uno de los cinco objetivos que contempla el programa, entre ellos, el de promover el crecimiento de la inversión en CTI. Destacó, asimismo, que el indicador en gasto en investigación científica y desarrollo instrumental respecto al Producto Interno Bruto pasó del 0.43% en el 2012 al 0.54% en el 2014, “y se espera que para el 2015 alcance o supere el 0.56%. La meta que nos hemos fijado para esta administración es poder llegar a una inversión pública y privada del 1% del PIB”.

Por su parte, el presidente de la AMC, Jaime Urrutia Fucugauchi, sostuvo que la ciencia es la fuerza productiva más dinámica y más importante en las naciones modernas. Indicó que en años recientes se hace énfasis en la transformación de las economías basadas en el conocimiento y la importancia de la CTI en el desarrollo económico y social. “La diferencia en los últimos años es que las  transformaciones ocurren en tiempos cortos y ritmos acelerados. El reto para los países es cómo fortalecer y ampliar las capacidades científicas y tecnológicas y  modernizar sus sistemas educativos”.

Señaló que para que ello ocurra, se requiere ampliar la infraestructura científica, los programas de cooperación, las relaciones internacionales, la movilidad y retener y atraer talento, creando las condiciones para que éste se desarrolle.

Recalcó que la preparación de investigadores y profesores, la creación de laboratorios, formación de grupos y centros de excelencia requiere de tiempo y de inversión, así como continuidad en las políticas dentro de marcos flexibles y autónomos.

Por otro lado, Urrutia recordó que como parte de sus actividades, las academias han privilegiado los aportes científicos y la excelencia, difundido los avances y atraído vocaciones científicas. “Desde sus inicios las academias han proporcionado asesoría a los gobiernos y sociedad en ciencia y tecnología. Estas tareas son parte sustantiva de la misión y visión de la Academia Mexicana de Ciencias”.

El director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Enrique Cabrero, indicó que la entrega del Premio de Investigación de la AMC es una oportunidad para reflexionar sobre la gran contribución que ha tenido el pensamiento científico en el avance de la humanidad. “Es indudable que, sobre todo en los últimos siglos, el conocimiento se ha convertido en la más poderosa herramienta del ser humano para transformar su realidad".

Añadió que la inmensa mayoría de los seres humanos ha gozado de los grandes beneficios del conocimiento científico, ejemplo de ello es que gracias a los adelantos en las ciencias de la salud y en la tecnología médica, el promedio mundial de esperanza de vida subió de alrededor de 31 años a principios del siglo XX a 75 años en nuestros días para el caso mexicano.

Destacó que la experiencia internacional indica que las economías basadas en el conocimiento, además de ser más competitivas al generar mayor innovación, son también más equitativas porque los avances científicos y tecnológicos ponen al alcance de la población, mejores servicios y bienes de consumo que elevan su nivel de vida.

"La AMC ha contribuido notablemente al desarrollo y promoción de la investigación científica y tecnológica en el país y los Premios de Investigación constituyen uno de los grandes aportes de esta institución con el que se da un merecido reconocimiento al talento de las nuevas generaciones de científicos mexicanos".

En su intervención, el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, reconoció a su vez que los investigadores galardonados son la evidencia concreta e irrefutable de que en México se hace ciencia de calidad, ciencia pertinente, ciencia rigurosa.

Compartió una serie de datos sobre el impacto de la ciencia mexicana en la economía del país: cada año, 65 mil jóvenes egresan de carreras de ingeniería, industriales, mecánicas, eléctricas y tecnológicas, cantidad mayor, sostuvo, a la de cualquier país de Europa, incluso de naciones con una población superior a la nuestra.

Agregó que el 16.3% de las exportaciones nacionales son consideradas de alto contenido tecnológico, según el Banco Mundial, cifra que aseguró es significativamente superior a la de otros países latinoamericanos como Chile y Brasil, e incluso de Canadá y Alemania.

“Hoy, el sector de ciencia y tecnología, las instituciones públicas y privadas, los centros de investigación están demostrando en los hechos que vale la pena invertir en ciencia y tecnología, sin embargo tenemos que estar decididos a hacer más ciencia y a ser más innovadores."

Ganadores del Premio de Investigación de la AMC, quienes fueron reconocidos con un diploma y un incentivo económico:

2012

Ciencias exactas

José Gabriel Merino Hernández

Química

Departamento de Física Aplicada

Centro de Investigación y de Estudios Avanzados, Unidad Mérida, IPN

Ciencias naturales

José López Bucio

Biología molecular

Instituto de Investigaciones Químico-Biológicas

Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo

Ciencias sociales

Irasema Alcántara Ayala

Geografía de riesgos

Instituto de Geografía

Universidad Nacional Autónoma de México

Humanidades

Alexandra Cristina Pita González

Historia

Facultad de Ciencias Políticas y Sociales

Universidad de Colima

Ingeniería y tecnología

Francisco Javier González Contreras

Óptica

Facultad de Ciencias

Universidad Autónoma de San Luis Potosí

2013

Ciencias exactas

Alfred Barry U'Ren Cortés

Óptica Cuántica

Instituto de Ciencias Nucleares

Universidad Nacional Autónoma de México

Ciencias naturales

Oscar Gerardo Arrieta Rodríguez

Medicina y oncología

Investigación Clínica, Medicina y Oncología

Instituto Nacional de Cancerología

Ciencias sociales

José Ramón Gil García

Administración pública

División de Administración Pública

Centro de Investigación y Docencia Económicas

Humanidades

Erik Velásquez García

Historia del arte y escritura jeroglífica maya

Instituto de Investigaciones Estéticas

Universidad Nacional Autónoma de México

Ingeniería y tecnología

Daniel Ulises Campos Delgado

Electrónica

Facultad de Ciencias

Universidad Autónoma de San Luis Potosí

2014

Ciencias exactas

Luis Arturo Ureña López

Física-Cosmología

División de Ciencias e Ingenierías

Universidad de Guanajuato

Humanidades

Claudia Paola Peniche Moreno

Historia de la cultura y organización social maya

Unidad Peninsular, Centro de Investigaciones y

Estudios Superiores en Antropología Social

Ciencias naturales

José Francisco Muñoz Valle

Medicina-Inmunogenética

Centro Universitario de Ciencias de la Salud

Universidad de Guadalajara

Ciencias sociales

Gian Carlo Delgado Ramos

Desarrollo sustentable

Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades

Universidad Nacional Autónoma de México