Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Veracruz y Puebla representan cerca del 75 por ciento de la pobreza alimentaria en el país, informó el subsecretario de Desarrollo Comunitario y Participación Social de la SEDESOL, Javier Guerrero García.
El funcionario se reunió en días pasados con diputados federales, a quienes ofreció dramático escenario de los focos de pobreza que generan violencia y fenómenos de inseguridad.
Añadió que por ello la dependencia a su cargo realiza recorridos para ubicar la infraestructura urbana, la densidad de población y condiciones de pobreza en cada uno de los polígonos de estudio, en coordinación con Sedatu y Gobernación.
Y fue aquí cuando el funcionario de la SEDESOL reveló con crudeza lo siguiente: “En estos polígonos de pobreza tenemos los mayores índices de delito en el país y donde hay áreas irregulares o rezago en materia de infraestructura y de servicios, niveles de desempeño más atrasado y deserción, así como inasistencia de los maestros a las escuelas, lo que representa un reto para la creación de políticas públicas”.
Obviamente se refirió a que todos esos fenómenos ocurren en las seis entidades que mencionó al principio, donde las condiciones sociales de pobreza y abandono han generado la brutal oleada de criminalidad que paulatinamente se extiende al resto de las entidades del país.
Guerrero García enfatizó ante los diputados con quienes se reunió, que se deben romper los esquemas clientelares de programas de gobierno, estatales y municipales que “llegan pensando que ofrecerán dádivas a las comunidades, cuando lo que deben plantearse es generar procesos de organización y participación comunitaria que realmente permitan combatir la desigualdad y la pobreza en nuestro país”.