El senador priísta René Juárez Cisneros urgió al Ejecutivo Federal a emitir el reglamento de la Ley General de Turismo, promulgada hace cuatro años, ya que la falta de este ordenamiento ha obstaculizado que México retome el liderazgo en esta actividad y ha repercutido en la falta de desarrollo del sector, en la generación de empleos y de inversiones.

Puso como ejemplo que uno de los efectos es la disminución en el flujo de turistas, ya que se estima que México alcanzó en 2012, la cifra de 23 millones 167 mil turistas internacionales, esto es uno por ciento menos de los que recibió en 2011. Del total, añadió, por lo menos 500 mil dejaron de visitar el país en cruceros.

Consideró necesario que dicha Ley deje de ser “meramente enunciativa”, y recordó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró que sólo el Presidente de la República puede expedir los reglamentos a leyes que emita el Congreso de la Unión, por lo que declaró la invalidez del primer párrafo del Artículo 4º transitorio de la ley citada y, como consecuencia, también se invalidan los artículos 48 y 54.

El legislador por Guerrero planteó reformar ambos artículos, a fin de que los prestadores de servicios turísticos cumplan con los elementos y requisitos que determine el reglamento de la ley, las normas oficiales mexicanas y otras disposiciones generales administrativas que emita la Secretaría de Turismo.

Con ello, se permitirá a la Secretaría de Turismo emitir disposiciones generales administrativas conforme a la dinámica que supone la actividad turística en el país, que hace ineludible la actualización de requisitos para regular una actividad que innova y evoluciona constantemente.

Abundó que la expedición de la Ley es un avance fundamental para ubicar al turismo como verdadera prioridad nacional, pues constituye una actividad económica noble, que genera empleos y atrae inversiones importantes para impulsar el crecimiento del país.

Esta exigencia ya la han presentado legisladores federales panistas y perredistas, pero ahora se suma el priísta guerrerense por el daño que está resintiendo la industria turística en todo el país.