El Pleno del Senado de la República avaló por mayoría reformar el artículo 60 Bis de la Ley General de Vida Silvestre, a efecto de prohibir la utilización de ejemplares de mamíferos marinos en espectáculos itinerantes.

El dictamen explica que la industria del espectáculo ha fomentado el cautiverio de animales, que es una forma de mala educación para el público y genera riesgos de zoonosis, es decir, transmisión de enfermedades del animal hacia el humano y del humano hacia el animal.

En México hay empresas que usan delfines, lobos marinos y aves exóticas en circos, y ferias locales, que son transportados en contenedores cerrados dentro de remolques, por carretera a lo largo y ancho del país, indica el documento. Estas condiciones son difíciles, pues el ámbito natural de delfines y lobos marinos es el mar, por lo que su calidad de vida se reduce considerablemente.

El dictamen hace énfasis en la necesidad de proteger y conservar los ecosistemas y las especies que habitan en ellos, para procurar la sustentabilidad y mantener nuestro capital natural.

Asimismo, plantea que se deben diseñar programas para la conservación de las especies, a través de la recuperación, reproducción, y reintroducción de algunas de estas. El cautiverio en zoológicos o acuarios "tradicionales", agrega el dictamen aprobado, ha sido puesto en tela de juicio por científicos, debido a que no aporta elementos para la conservación de estas especies.