La Mesa Directiva del Senado de la República turnó a la Junta de Coordinación Política el documento que el Comité de Padres de Familia de los estudiantes desaparecidos de la Normal “Rural Raúl Isidro Burgos”, de Ayotzinapa, Guerrero, entregó el martes pasado a senadores, donde solicitan se inicie un proceso para declarar formalmente la desaparición de poderes en ese estado.
Asimismo, los solicitantes piden a este cuerpo legislativo que emita un punto de acuerdo, mediante el cual declaren la suspensión de las elecciones en Guerrero, por no existir condiciones para ello; exigen la presentación con vida de los 42 estudiantes desaparecidos y justicia para los 4 jóvenes asesinados, así como atención médica a los lesionados.
También pidieron que se formule un exhorto a la Procuraduría General de la República (PGR) para que abra líneas adicionales de investigación, atienda los elementos de prueba que implican al Ejército Mexicano, la Policía Federal y al exgobernador Ángel Aguirre Rivero.
Familiares de los estudiantes desaparecidos y estudiantes de la Normal Rural solicitan además al Senado que ratifique, en lo inmediato, la competencia del Comité de Desaparición Forzada de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a efecto de que pueda conocer de peticiones de investigación sobre estos delitos en México.
En el documento se señala que, a la fecha, las investigaciones siguen presentando debilidades, pues la PGR “no ha logrado establecer con pruebas sólidas cuál es el paradero de todos los estudiantes”.
La hipótesis de la PGR, se agrega, no ofrecen pruebas contundentes que indiquen dónde se encuentren los 42 estudiantes desaparecidos. Los tres testigos sólo hacen referencia a un número menor que habrían sido asesinados en el basurero de Cocula, “de tal forma que se ignora y no existe prueba contundente del paradero de nuestros hijos y compañeros”.
Por ello, “nos pronunciamos por que la investigaciones se sigan fortaleciendo y que la búsqueda en vida mantenga su intensidad, en modo alguno aceptamos un cierre o carpetazo del caso. Los padres de familia tenemos derecho a la verdad, por lo que los hechos deben ser esclarecidos a cabalidad”, establece el documento, al que se dio lectura ante el Pleno del Senado.
Además, consideraron inadmisible que el Congreso de la Unión “quede como un simple espectador de la crisis, emitiendo pronunciamientos débiles, tratando de tramitar propuestas sin rumbo y sin voluntad de ejercer un control real sobre las decisiones del Ejecutivo, que no han dejado satisfecho al movimiento ni a los sectores de la sociedad que se han solidarizado con Ayotzinapa”.
Para el Comité la presente Legislatura “ha hecho cambios legales y constitucionales que lejos de atacar la profunda desigualdad social y la inseguridad, han mantenido el status quo en todos los ámbitos de la vida nacional, por lo que su responsabilidad con la lucha de Ayotzinapa debe ser total, y sin barreras políticas creadas por los intereses ilegítimos que los han orillado a desatender el problema”.
Al respecto, el senador Miguel Barbosa Huerta, presidente de la Mesa Directiva, expresó que el Senado tiene la obligación de dar trámite a este memorial de particulares y dar respuesta por escrito a esta petición que se recibe. Dijo que se dará un debate, una vez que la Junta de Coordinación Política envíe una propuesta a la solicitud del Comité de Padres de Familia.
Recordó que este martes un grupo de senadores recibió y escuchó con respeto a los familiares de las víctimas, por quienes “sentimos respeto y profundo dolor por los hechos ocurridos; no hay senador o senadora que no sienta ello”.
En la reunión, agregó, hubo un lenguaje fuerte, con el que expresaron su dolor, rabia, inconformidad por la forma en que se han atendido estos hechos; y tienen razón: “aceptamos la crítica porque somos servidores públicos y tenemos que darles respuesta”.
Por eso envía la solicitud a la Junta de Coordinación Política, “no para su olvido”, sino para dar respuesta y atención antes de que vayamos al receso, explicó. El Senado no ha sido parco en las opiniones de solidaridad o muestras de inconformidad ante este horror, puntualizó.