México es un mejor país cuando decidimos juntos mujeres y hombres, por lo que es necesario un proceso de transformación cultural para lograr la paridad total en la toma de decisiones y la igualdad de oportunidades, afirmó el presidente de la Cámara de Diputados, Ricardo Anaya Cortés.
Durante la firma de un convenio de colaboración entre este órgano colegiado y el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), señaló que el acuerdo ocurre en un momento particularmente oportuno, dado que el próximo 17 de octubre se conmemoran los 60 años del reconocimiento –“que no el otorgamiento”— del derecho de las mujeres a votar y a ser votadas, “el cual ya les correspondía”.
Sostuvo que el reconocimiento del derecho de las mujeres a votar y ser votadas, hace 60 años, no significa el cumplimiento de una meta, sino apenas el inicio de un largo camino hacia el objetivo de lograr la paridad en el ejercicio de la toma de decisiones y la igualdad de oportunidades entre mujeres y entre hombres.
Las acciones afirmativas, continuó, las cuotas de género, permiten que sea cada vez más importante la presencia de las mujeres. “Ojalá no tengamos que esperar a celebrar el 70 o el 80 aniversario para que la paridad sea total, 50 por ciento mujeres y 50 por ciento hombres”, enfatizó.
Expresó que en las sociedades democráticas el espacio público es por excelencia un espacio entre iguales, por lo que llamó a las presentes a que “jamás minimicen su propio ejemplo, porque el hecho de que ustedes hoy sean presidenta, diputadas o directora, no se explicaría sin la trayectoria de otras mujeres que fueron antes de ustedes y que lograron echar abajo el mito de que ustedes no debían o no podían estar en donde hoy están”.
“Están abriendo el camino para las que vienen atrás en esta senda que tiene como meta definitiva la igualdad de oportunidades y la paridad en la toma de decisiones”, puntualizó el diputado Anaya Cortés.
La diputada Flor de María Pedraza Aguilera, presidenta del Comité del Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad de Género (CEAMEG), señaló que con la firma de este documento el Ejecutivo y el Legislativo ratifican su compromiso de velar y trabajar por los temas que competen a la mujer mexicana.
“Damos muestra de voluntad y amor por la labor que desempeñamos en ambas instancias; la preservación de los trabajos enfocados en la perspectiva de género y el principio de igualdad entre hombres y mujeres debe ser protagonista de nuestros intereses como servidores públicos”, subrayó.
Reconoció que a pesar de los avances quedan pendientes muchas cuentas y sigue abierta la discusión para alcanzar la plena igualdad de género, “esa condición de igualdad que el Estado debe propiciar en cuestión de oportunidades a lo largo de la vida. Igualdad de trato, de empleo, la igualdad de justicia y de derechos, principalmente”, puntualizó.
Mencionó que la condición como mujeres “nos hace más vulnerables en ámbitos diferentes de la vida y es esa vulnerabilidad que debemos atacar como instituciones comprometidas”.
Dijo que el convenio representa las esperanzas de las mexicanas para sentir la plenitud de una vida digna y disfrutar de las oportunidades que brinda un espacio libre de ataduras, prejuicios e injusticias.
A su vez, la presidenta del INMUJERES, Lorena Cruz Sánchez, indicó que la firma de este convenio es una alianza estratégica para incidir en los vacíos legales y conocer las fisuras del marco jurídico de los derechos humanos de las mujeres en México.
Además, permitirá sustentar acciones legislativas para diseñar políticas públicas que fortalezcan a las mujeres y reduzcan las grandes desigualdades que todavía se observan.
Dijo que el convenio debe impactar en la labor legislativa para lograr una armonización integral, acorde con los principios de igualdad y no discriminación plasmados en la Constitución. Además, dijo, organismos multilaterales como la CEDAW han señalado al Estado mexicano la necesidad de armonizar la legislación.
Planteó que se debe incluir la visión de género e igualar las definiciones de los tipos y modalidades de violencia contra las mujeres en todos los códigos penales del país, así como preparar a quienes deben procurar e impartir justicia con perspectiva de género.
Agregó que el proceso de armonización legislativa quedará trunco si no incluye la erradicación de prácticas discriminatorias y consideró necesario asegurar que las y los servidores públicos de los tres órdenes de gobierno conozcan los instrumentos internacionales que protegen los derechos humanos de mujeres y niñas.
Dijo que el Poder Legislativo es una de las fuerzas más poderosas para impulsar la política nacional de igualdad y señaló que el trabajo conjunto permitirá realizar cambios profundos en disposiciones que excluyen a las mujeres del beneficio de la justicia.
“Es lamentable que en 26 estados del país, el robo de ganado tenga una penalización más alta que la establecida para quien abuse sexualmente de las mujeres” o que se considere un delito raptar a una mujer, pero se exculpe al raptor si se casa con la víctima.
Se pronunció por tipificar el delito de feminicidio en todas las entidades federativas. “De ahí la importancia, dijo, de la participación de los Poderes Legislativo y Ejecutivo y acordar acciones para corregir tales aberraciones”
Manifestó la disposición del INMUJERES para apoyar a los congresos locales, y lograr una completa armonización legislativa nacional que proteja el derecho de las mujeres a la justicia efectiva en todo el territorio, “sean mexicanas o estén de paso, como tantas migrantes que hay en el país”.
Para el INMUJERES, la firma del convenio “es una tranquilidad y una garantía porque fortalece las relaciones con el Legislativo y da muestra de su disposición para trabajar en la armonización de leyes”.